El fracaso de las negociaciones entre el SOMU y las cámaras empresariales de la semana pasada dejó al sector inmerso en un conflicto de difícil resolución, toda vez que el diálogo quedó interrumpido a instancias del sindicato que decidió no continuar negociando y rechazar todas las alternativas que les ofrecieron.
‘Operativo distracción’
El viernes 20 de junio, la conducción de la seccional Puerto Madryn del SOMU, con César ‘Castor’ Zapata a la cabeza, llevó a los marineros a protestar lejos de la ciudad. A diferencia de los días anteriores, el gremio movilizó a sus afiliados a 15 kilómetros al norte de Madryn; allí en la intersección de la Ruta 3 con la Ruta 2 que conduce a Puerto Pirámides, los marineros exteriorizaron sus reclamos, con quema de cubiertas y cortes intermitentes del tránsito.
El sindicato aconsejó a los marineros no seguir con los piquetes en inmediaciones del muelle Storni, sino trasladarse afueras de la ciudad, y tras algunas horas, cantaron el himno nacional argentino y se recomendó que los trabajadores retornen a sus domicilios hasta después del fin de semana largo.
Coincidentemente, en momentos que el sindicato llevó a los marineros a 15 kilómetros al norte de la ciudad, el gobernador Ignacio Torres ingresó a Puerto Madryn a visitar el rompehielos ARA Almirante Irízar en el muelle Piedra Buena.
Así, el SOMU evitó que los marineros lleven la protesta al otro muelle y les aconsejó a sus afiliados que vuelvan a sus casas, para retomar los reclamos esta semana. Zapata hizo su tarea.
Piden que baje Durdos
En tanto, en la improvisada asamblea que los marineros realizaron en las afueras de la delegación seccional de Puerto Madryn del SOMU hubo enérgicos pedidos para que el secretario General, Raúl Durdos y su secretario de Pesca, Juan Navarro, se hagan presentes en la ciudad. La comunicación que tiene la conducción sindical es a través de Facebook y X, con comunicados y videos, pero los afiliados quienes verles la cara en el sur.
Desde que comenzó el conflicto, los marineros vienen pidiendo que las máximas autoridades del gremio se den cita en Puerto Madryn porque le quieren transmitir sus inquietudes directamente, sin intermediarios.
Diálogo interrumpido
El conflicto que afecta a la flota congeladora tangonera está en su peor momento. Desde marzo se venía negociando, con diferencias y cruces, pero había diálogo, había canales abiertos entre las partes.
El pasado miércoles cuando el SOMU decidió clausurar las negociaciones y retirarse de la reunión con las empresas en el Ministerio de Capital Humano para irse a la marcha de Cristina Kirchner, ha sido un punto de inflexión que genera una situación de incerteza para toda la actividad y su cadena productiva.
Fuente: Revista Puerto