En el trabajo intervinieron buzos de la empresa Canal y Canal, que contaron con la embarcación “Alpha I” de apoyo. Con la utilización de bolsas de aire, bombas de achique y la colaboración de tripulantes y trabajadores del sector el jueves la embarcación volvió a flote.
Para el armador, Javier Pennisi, será tiempo de evaluar los daños, sobre todo en las partes más sensibles de la unidad como motor, equipos electrónicos, de comunicación y demás. De todas maneras, ya anticipó que la lancha volverá a operar: “No nos daremos por vencido, vamos para adelante”, dijo.
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