Las capturas pesqueras en el río Yangtsé han descendido al 25% desde los años 50 y eso a pesar del gran incremento en el esfuerzo pesquero. Las autoridades de Pekín han decretado desde 2020 una veda en buena parte del cauce que durará 10 años para permitir que se recupere la fauna piscícola. La medida afectará a más de 100.000 embarcaciones
Con la entrada del año 2020, los chinos ya no podrán pescar en el Yangtsé, el río que con 6.300 kilómetros de longitud es el más largo de China y el tercero del mundo, ya que el Gobierno ha prohibido durante 10 años las actividades pesqueras en sus aguas para “proteger la biodiversidad”, informa la agencia estatal Xinhua.
La prohibición afecta a 332 áreas protegidas de la cuenca del río, pero en este año deberá ser extendida también a todos los canales naturales, afluentes y grandes lagos, según la decisión del Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales.
En las aguas no afectadas por estas prohibiciones también se deberán imponer restricciones, aunque la escala y duración serán decisión de las autoridades pesqueras provinciales.
La decisión, explica la prensa oficial, afectará a más de 110.000 barcos pesqueros y a 280.000 pescadores en las 10 regiones bañadas por el Yangtsé, y las autoridades han prometido ayudas para quienes se vean obligados a buscarse nuevas formas de ganarse la vida.
El viceministro de Agricultura y Asuntos Rurales, Yu Kangzhen, aseguró que esta moratoria es “un paso clave para luchar contra el agotamiento de los recursos biológicos y la degradación de la biodiversidad” en el río, afectado durante muchos años por la sobrepesca, la contaminación y las presas.
Los datos oficiales muestran que el Yangtsé produce hoy solo el 0,32 % de los productos de agua dulce de China, ya que en los últimos años la pesca anual se ha situado en menos de 100.000 toneladas, cuando en los 50 eran más de 420.000 toneladas, de acuerdo al Agora Diario.
Entre las especies afectadas por las actividades humanas se encuentra el delfín del Yangtsé, un mamífero de agua dulce exclusivo de China que se declaró extinto en 2006, o el esturión chino, prácticamente extinto en la naturaleza.