Crisis en la pesca. José Di Costanzo es parte de una empresa familiar que cuenta con tres barcos fresqueros que no superan los 3 mil cajones y una planta de procesamiento con 80 obreros en el Parque Industrial de Mar del Plata. Siempre creyó que la estructura de la empresa lo colocaba en una mejor situación, pero hoy trabaja a pérdida tanto en la planta como en el barco y lo que era una ventaja se volvió un chaleco de plomo. Nos recibe en las oficinas de ALFA junto a la gerente de la cámara Ayelén Fortunato, para plantear la situación del sector fresquero marplatense, más específicamente del estrato de flota compuesta por barcos medianos que se dedican a la captura de merluza, pero también al variado costero y pelágicas. Un sector que vive una realidad muy distinta a la de las empresas integradas y cuya diferenciación, sostienen, es imprescindible comprender para atacar el problema de fondo.
REVISTA PUERTO: Desde ALFA han planteado que es necesario barajar y dar de nuevo. ¿Qué significa?
AYELEN FORTUNATO: Tenemos que hacer un análisis de situación para saber dónde queremos ir porque hoy los números no dan, no hay posibilidad de ser rentables. En nuestro estrato de flota debemos rever cada punto de la cadena de producción. No es una situación fácil, no son agradables las conversaciones que vamos a tener, pero si queremos seguir siendo rentables y positivamente activos en esta industria, lo tenemos que hacer y lo tenemos que hacer con mucha conciencia.
RP: ¿Cuándo plantean que no serán charlas agradables, se refieren a las discusiones que se van a plantear con los trabajadores?
AF: Justamente para que nadie pierda su puesto de trabajo y hablo desde el dueño de la empresa hasta el último peón de planta, necesitamos sentarnos a tener esas charlas que no son agradables. Incluidos proveedores comerciales y también el gobierno con sus estructuras nos sobrecargan de trabajo y costos. La realidad es que acá tenemos que replantearnos como industria cómo ser más rentables y más proactivos.
RP: ¿Cómo se imaginan que pueden llegar a un acuerdo de paritaria cero o incluso de baja con algunos gremios?
AF: Justamente estamos trabajando en eso para llegar a esa instancia con contenido y con el menor costo para cada uno de los trabajadores de toda la cadena productiva. Tenemos que ser muy conscientes y hacer un trabajo introspectivo muy grande para poder cambiar el paradigma de esta industria, publicó rp.
RP: Desde hace un tiempo vienen planteando que todo sale del mismo cajón de pescado y que no se le podía sacar más. ¿En qué situación está hoy ese cajón?
AF: No da más. En cada una de nuestras mareas, en lo que es pelágicos, variado costero y merluza estamos yendo a pérdida. No se puede sostener durante mucho tiempo más. Venimos diciendo desde hace un año y medio que estamos inmersos en una crisis, que nuestra espalda no da más, que nos están doblando, no queremos llegar al quiebre, no queremos dejar de trabajar y no queremos dejar de ser productivos, pero necesitamos rever situaciones.
JOSÉ DI COSTANZO: El número no da y no sabemos hasta cuándo van a aguantar las empresas para sostener toda la estructura que tenemos. El cajón de pescado no da más y es de ahí de donde sale todo. Pescamos principalmente merluza y hoy la merluza es un problema porque no hay demanda en el mercado interno, porque no hay demanda en el mercado externo o la demanda está, pero con precios bajísimos. El contexto internacional no nos ayuda porque la mayoría se exporta y Brasil devaluó, paga precios baratos y nosotros somos caros para el mundo, entonces ya no somos competitivos.
RP: Los costos para el filet de merluza se ubican entre los 3200 y 3500 dólares. ¿Cuál es el precio de venta que tienen hoy para el mercado de Brasil?
JDC: Los precios de venta del filet de merluza a Brasil cayeron en el último año de un valor que se ubicaba entre los 3600 y 3700 dólares la tonelada a un valor por debajo de los 3000 dólares, está entre 2900 y 2800 dólares, hasta hemos tenido ofertas de 2750 dólares. Nosotros no somos formadores de precios, el brasileño te dice ‘devaluamos, no puedo aumentar y esto es lo que puedo pagar’, listo. No tenemos opciones y en el mundo hay opciones de otros pescados blancos baratos. Nosotros hacemos algo de merluza entera y H> no estamos haciendo porque los números no dan. En lo que es merluza entera hace poco hablé con un cliente, le pasé mis costos sin pretender ganar, solo para salvar los gastos y me dijo: estoy comprando en México a 200 dólares menos la tonelada.
AF: Y cuando hablamos de merluza entera estamos hablando de menor valor agregado, menor intervención de mano de obra y menos costos también. Nosotros tenemos que dejar de ser exportadores de commodities, para pasar a hacer productos de góndola, pero para eso necesitamos rever situaciones en el contexto general.
RP: En las variables que hay que revisar, existe un orden de prioridades.
AF: Hoy todo es prioridad, es el conjunto íntegro. Hoy nos tenemos que sentar a hablar para desregular y simplificar el Estado, que está presente en cada una de las actividades de la pesca. Nos tenemos que sentar a hablar con todos y lograr que se entienda. Hay un gran desconocimiento de este sector. Se piensa que todo es lo mismo, lamentablemente hay un gran desconocimiento sobre lo que significa el trabajo en continente, lo que significa ser un extractivo pesquero de un promedio de 2500 o 3 mil cajones, lo que significa la pesca variada, la pesca de merluza, de pelágicas…
RP: Esta situación no parece estar clara siquiera dentro del sector, porque a la hora de discutir paritarias se terminan imponiendo los valores que fijan las empresas integradas.
AF: Estas son cosas que suceden y por eso estamos haciendo el trabajo también interno. Por eso digo que no son charlas fáciles y no solo por la mano de obra. Pero son situaciones que es necesario atender para llegar al fondo de la situación.
JDC: Estamos trabajando con consultoras, con gente que entiende del tema para ver punto por punto, porque acá la solución no llega solo con que nos saquen los derechos de exportación, no se soluciona el mundo solo con eso. Acá se necesita un conjunto de cosas, las retenciones, la desregulación para sacar trámites y costos de todo tipo, impuestos…
RP: ¿Por qué creen que quedaron fuera de las retenciones, si durante todo 2024 estuvieron presentado informes sobre los costos del sector?
JDC: Para mí no alcanzó o no se acusó recibo de eso.
AF: O los interlocutores no están haciendo un trabajo válido, nosotros podemos presentar informes, pero bien sabemos que hay estructuras que son piramidales, nosotros somos la base. Evidentemente hay alguna falla en el hilo conductor para poder trasladar los conflictos reales que tiene esta industria. Nosotros estamos haciendo un trabajo de difusión, estamos haciendo presentaciones como corresponde, sea en medios de comunicación o en organismos con los pasos administrativos que corresponden. Pero evidentemente en algún punto está fallando, dónde está fallando hoy no te lo puedo decir.
RP: Los subsecretarios de Pesca muchas veces han actuado como nexo con los funcionarios decisores del gobierno, no parece que se estén generando estos espacios hoy con López Cazorla.
AF: Nosotros le pedimos muchas veces que se generaran reuniones más arriba, eso por lo menos en nuestro estrato de flota, no ha sucedido. No quiere decir que él no las haya tenido, ni quiere decir que otros u otras cámaras no las hayan tenido.
RP: ¿Ven posibilidades de revertir la exclusión en la quita de retenciones?
AF: El Subsecretario se está interiorizando, nos está pidiendo informes para hacer presentaciones más contundentes y estamos haciendo eso, al igual que otras cámaras, no sé si se podrá revertir. Con el Subsecretario hablamos prácticamente todos los días, siempre nos ha atendido y tiene las puertas abiertas. Después, bueno, las respuestas a la industria no las hemos visto en lo que necesitamos. El tema de las retenciones no es que nos van a salvar porque necesitamos una batería de medidas, pero es un muy buen gesto y es el saber que nos están escuchando y están actuando en consecuencia de esta industria.
RP: Después de haber hecho tantas presentaciones sobre lo que genera la industria, ¿no creen que en realidad no existe interés en conocer al sector?
JDC: Creo que hay una evaluación errónea de cómo está el sector. Se habla mucho de que extraemos y no pagamos nada y en realidad el derecho único de extracción no es lo único y capaz que no sea lo primordial, sino que hay un montón de costos e impuestos atrás de un montón de organismos que hacen que lleguemos al punto en el que estamos. Por eso hoy estamos mostramos los números, no tenemos miedo de mostrar todo para que vean que lo que nos están aumentando suma pérdidas a las que ya tenemos. No es que voy a dejar de ganar, hoy ese ya no es el problema.
AF: Mirá hasta dónde se desconoce la industria que los derechos únicos de extracción no están puestos por el valor del muelle, están puestos por el valor de exportaciones y el extractivo en la mayoría de los casos no es exportador directo. Entonces, me están haciendo pagar un valor de extracción por un valor de exportación y en esa cadena productiva yo no estoy.
RP: El Subsecretario tuvo una firme postura en defensa del aumento del DUE propuesto por el gobierno; ¿él también desconoce las diferentes realidades que conviven en el sector?
AF: No lo creo, pero en este punto la cosa es más alarmante todavía porque los derechos únicos de extracción fueron a votación dentro del seno del Consejo Federal Pesquero, cosa que es más alarmante todavía y se aprobó; y si se aprobó tuvo que haber, como mínimo, seis votos positivos.
RP: El único voto en contra fue de la Provincia de Buenos Aires.
AF: Exactamente. El único que realmente expuso y explicó por qué estaba votando en contra fue la Provincia de Buenos Aires. Esto es real. Hubo un cambio en el equipo de la provincia muy importante después de la ley Bases y han tenido una representación mayor y una postura más sólida.
RP: ¿Con esta realidad cómo imaginan que puede terminar su empresa el año 2025?
JDC: No sabemos. Somos una empresa familiar y ayer, hablando con mi familia, planteamos esto que te cuento de la caída del precio de merluza, porque hoy se pesca porque los barcos tienen que seguir haciendo girar la rueda, porque hay doce familias mínimo por barco, más la planta; y no podés parar todo eso porque a vos no te da el número. Y si parás, capaz que perdés lo mismo que trabajando, porque los costos fijos son increíbles y la verdad que no sabemos hasta cuándo podremos aguantar de esta manera.
RP: Da la sensación de que esta situación los está empujando a terminar siendo o volviendo a ser solo armadores y desandar el camino de industrialización.
JDC: Sí, la verdad que siempre fue una ventaja competitiva que teníamos por tener la captura y la elaboración, hoy no tengo esa ventaja porque pierdo en las dos patas. Hoy el gran problema es que ni los frigoríficos, siendo sólo frigoríficos, son rentables, ni los barcos siendo solo armadores son rentables; y hay que sostener esas pérdidas, entonces es complejo. En el largo plazo, esto termina con barcos no renovados, con barcos atados con alambre, todo se vuelve más riesgoso y peor para la industria. Estamos haciendo merluza entera, no podemos hacer esos productos hoy en día.
AF: Acá el problema no es trabajar, sino que no nos están dejando trabajar, sabemos hacerlo con plata y sin plata. El problema es cuando estás viendo el fondo y te estás aproximando al abismo. Pensaron durante mucho tiempo que nosotros lo estábamos inflando, que estábamos llorando. Eso fue lo que percibimos, tanto de los grandes medios de comunicación como del gobierno, pensaron que estábamos llorando por llorar. Es más, lo sentimos hasta dentro del propio sector en otros segmentos extractivos. Por eso digo que hay que diferenciar lo que somos cada uno. No somos todos lo mismo, no tenemos todos la misma realidad y cada uno tiene que descubrir dónde está su quiste para poder sacarlo.