Crisis pesca Mar del Plata. La sociedad comercial entre Pedro Baldino y Leandro Ciccolella parece tambalearse bajo la crisis de rentabilidad que afecta a la cadena del pescado fresco, la cual se siente de manera singular en el puerto marplatense.
Los armadores tienen parte de su flota parada por reparaciones y ofrecen retiros voluntarios para los tripulantes que ahora se mantienen inactivos a la espera de que terminen los trabajos en los barcos en los que se embarcan.
Los armadores son propietarios de una amplia flota de barcos: “San Andrés Apóstol”, “Mellino VI”, que acaba de salir de dique en Tandanor y llegar a Mar del Plata para completar reparaciones finales y volver al agua. El “Galemar”, que quedó parado en diciembre con problemas de inyección en el motor principal, fue puesto en seco en dique y su futuro en incierto dada la antigüedad que tiene.
También cuentan con el “Sirius II”, que debe hacer dique próximamente y también hay dudas que lo supere y de la compra del Marisco, adquirieron los dos fresqueros: “El Marisco II” y “El Marisco I”.
La oferta de retiro alcanza por ahora a los trabajadores marítimos ligados al “Galemar” y a “El Marisco II”. Entre ambos sumar 40 personas, de los cuales 28 son marineros. Por este grupo comenzaron los llamados con la propuesta de salida.
“El Marisco II” es un cajonero de más de 7 mil cajones que el año pasado estuvo en el ojo de la tormenta luego que se filtraran imágenes de pesca dirigida al abadejo. No fue multado ni infraccionado pero quedó parado de oficio.
El 28 de noviembre lo llevaron a Tandanor para hacer dique pero recién subió a seco la semana pasada. A modo de sanción por la filtración de las imágenes, la dotación de seguridad que lo llevó al puerto capitalino fue la del “Mellino VI”.
“Lo sacaron de madrugada, a escondidas. Ya estaban los motores prendidos cuando subieron los marineros y salieron”, cuenta un tripulante de “El Marisco II”. “Desde aquella marea no volvimos a pescar… ya cobramos todos los francos, las vacaciones y no nos dejan embarcar en otros barcos. Hace dos meses cobro el sueldo básico, menos de 500 mil pesos”, contó el trabajador.
Las represalias parecen continuar. Al 11 de febrero todavía no habían cobrado el sueldo básico. El llamado que recibieron fue para arreglar la desvinculación de la empresa. “Nos ofrecen 5 millones, dos millones, según el caso. Lo mismo pasa con los compañeros del “Galemar”, que también está parado.
Desde el SIMAPE aseguraron que todavía no se había hablado nada con los armadores pero de haber un acuerdo sería con los tripulantes del “Galemar”, y el compromiso de recontratarlos si supera el dique y renueva certificados, publicó rp.
El año pasado el plan de retiros voluntarios había comenzado con los obreros de tierra. En “El Marisco” son obreros bajo convenio 161/75 y la lista desde que llegaron Baldino y Ciccolella no paró de reducirse. Entre peones y envasadoras eran 35 trabajadores. Ahora quedan apenas 20.
En “Friopesca”, la pyme que reúne mayormente a fileteros y peones, pasaron de ser 56 obreros a 30 trabajadores. “Al que no arreglaron lo despidieron”, contó uno de los trabajadores de la planta ante la consulta de este medio.