En la tarde del viernes circuló una nota firmada por el director de Pesca de la Nación, Mauricio Remes, en la que solicita dejar sin efecto el nombramiento de Eduardo Gismondi. El SiMaPe presiona para que le confíen la caja del distrito.
Eduardo Gismondi llegó a la Delegación del puerto de Mar del Plata en abril de este año y desde entonces estuvo a cargo de los controles en el principal puerto del país. Si bien había trabajado junto a Ricardo Echegaray en el ONCCA y con Guillermo Moreno en la UESCI, unos meses de militancia en Cambiemos y la mano amiga del Subsecretario de Ganadería le habían alcanzado para acceder al cargo.
Pero su función terminó antes de lo pensado. Luego de que se diera a conocer una lista, que él mismo habría elaborado, con el nombre de inspectores y administrativos que serían desvinculados del organismo, su jefe Mauricio Remes comunicó que ya no eran necesarios sus servicios. Pero todo siempre puede ser peor y a última hora de ayer, Pablo Trueba, el secretario del SiMaPe, pidió que gente del gremio se hiciera cargo de los controles.
En una nota dirigida a la Delegación de Pesca, el director Nacional de Coordinación y Fiscalización, Mauricio Remes Lenicov, señala textualmente: “Tengo el agrado de dirigirme a ustedes a fin de comunicarles que esta Autoridad ha decidido dejar sin efecto la designación del Sr. Eduardo Gismondi como Responsable a Cargo de la Delegación Mar del Plata informada oportunamente mediante el Memo DECyFP Nº 67/2018”.
La nota no expone los motivos de la desvinculación, pero dentro del Distrito creen que sobraban los motivos para apartar del cargo a Gismondi. El que se considera de más peso es la pésima relación que tenía con los inspectores; el ser señalado, además, como la persona que armó la lista de los 20 trabajadores que serían desvinculados, habría profundizado el malestar.
Por otra parte, el hecho de haber autorizado el despacho de los barcos sin inspector, pasando por encima de su superior, Mauricio Remes, pudo ser otro de los motivos que animaron su desvinculación. Ese hecho obligó al Director a dirigir nota al Prefecto Mayor de la PNA Mar del Plata, remarcando que el único organismo que podía otorgar una autorización era la Dirección a su cargo. Pero no son más que especulaciones porque el motivo real nadie lo conoce.
Lo que sí se sabe es que apenas circuló el rumor, Pablo Trueba, secretario General del SiMaPe, viajó a Buenos Aires y ayer se reunió con el subsecretario de Pesca, Juan Bosch, para negociar la reincorporación de algunos despedidos afiliados al gremio a cambio de otros trabajadores que no comulgan con el dirigente gremial.
Además, aseguran fuentes cercanas al propio Subsecretario que Trueba pidió insistentemente que el cargo de Jefe de Distrito fuera ocupado por un hombre de su riñón. “Lo que quieren es manejar la caja de los controles”, aseguró la fuente, que por obvias razones pidió anonimato.
Cabe recordar que no es la primera vez que la Dirección de Pesca y Juan Bosch delegan en el SiMaPe algunas funciones que les son propias: fue el sindicato de Pablo Trueba el que realizó el seguimiento y dio el visto bueno a las reparaciones hechas sobre el barco Repunte, pocos días antes de su hundimiento.
