En el marco del operativo de vigilancia “Mare Nostrum VI”.
La Armada Argentina detectó la presencia de un buque pesquero español dentro de la Zona Económica Exclusiva Argentina (ZEEA), sin que el hecho derivara en penalidades administrativas.
Este episodio ocurrido en el Mar Argentino reavivó el debate sobre la efectividad de los controles marítimos y la aplicación de sanciones a flotas extranjeras.
El incidente
De acuerdo con escenariomundial. En este sentido, el incidente se produjo el 4 de diciembre, cerca de las 21 horas, cuando el patrullero oceánico ARA Almirante Storni.
Con apoyo de una aeronave P-3 Orion de la Aviación Naval, identificó al BP Fakir, un arrastrero de 53 metros de eslora perteneciente a la empresa española Freiremar.
La nave se encontraba a la altura de la milla 199, navegando a una velocidad de entre 0,5 y 2 nudos, compatible con maniobras de pesca, y sin establecer comunicación radial con las autoridades argentinas.
Situación reportada
La situación fue reportada a la Subsecretaría de Pesca de la Nación, que analizó los datos de posicionamiento satelital del sistema AIS.
Finalmente, el organismo resolvió no iniciar un sumario por pesca ilegal, al concluir que las maniobras observadas correspondían a tareas de alistamiento y reposicionamiento, sin evidencia de captura efectiva.
En consecuencia, el pesquero continuó su navegación hacia aguas internacionales sin ser sancionado.
Esta decisión generó malestar en el sector pesquero nacional, donde se cuestiona la disparidad de criterios aplicada por la autoridad de control.
Armadores y representantes de la flota fresquera argentina recordaron que embarcaciones de bandera nacional recibieron multas millonarias por conductas similares o incluso menos comprometedoras.
Lo que alimenta la percepción de un trato desigual frente a buques extranjeros.
Punto de vista jurídico
Desde el punto de vista jurídico, especialistas señalan que la CONVEMAR garantiza la libertad de navegación dentro de la ZEE, dado que no se trata de mar territorial.
Sin embargo, remarcan que la combinación de velocidad compatible con arrastre, ausencia de notificación y proximidad al límite jurisdiccional habilitaba al menos una interpretación más restrictiva.
Para los críticos, la desestimación del caso debilita el carácter disuasivo de los operativos de control naval.