España consume más pescado que otros países de Europa, pero lo compra en el súper. Así, nuestro país ha vuelto a colocarse a la cabeza en consumo de pescado en Europa. El 92% de los españoles consume mensualmente productos derivados de la pesca y la acuicultura, seguidos por portugueses y suecos (87%), según los datos del Eurobarómetro de este año elaborado por Kantar TNS. Y, además, en 2016, –últimos datos aportados por MERCASA, los hogares recurrieron mayoritariamente para realizar sus compras de productos de la pesca a los supermercados, con un 58% de cuota de mercado.
El informe Alimentación en España 2018 de MERCASA apunta, por su parte, que durante el año 2017, los hogares españoles consumieron 1.082,4 millones de kilos de productos de la pesca y gastaron 8.971,3 millones de euros en estos productos. En términos per cápita, se llegó a 23,7 kilos de consumo y 196,7 euros de gasto. El consumo más notable se asocia al pescado fresco (10,5 kilos por persona y año), lo que representa un 44,3% del consumo total de productos de la pesca, seguido de las conservas de pescado y molusco (4,4 kilos per cápita y 18,6% de consumo) y de marisco y molusco fresco (3,5 kilos per cápita y 14,8% del consumo total).
Volviendo a la comparativa europea, en línea con el elevado consumo en nuestro país, el 66% de los españoles compra pescado y derivados al menos una vez a la semana, cifra 30 puntos superior a la media europea (36%). En este indicador, los datos se mantienen muy estables respecto al año pasado, aunque se observa un ligero crecimiento de la compra mensual (21%) frente al 19% de 2017. A nivel europeo el porcentaje de ciudadanos que no compra nunca o casi nunca pescado o productos de acuicultura continúa siendo elevado, un 21%.
En la decisión de compra, el precio continúa siendo el segundo aspecto más importante, mencionado por el 56% de los españoles, aunque a un nivel inferior al del año pasado (65%). El primer aspecto que se tiene en cuenta es la apariencia (frescura, presentación, etc.), mencionado por un 65% de los españoles. Ambos aspectos son más importantes en España que en la media europea. Cabe destacar, además, que en 2018 se redujo en cinco puntos la proporción de españoles que considera que este tipo de productos son caros, mientras que se prefiere el consumo de productos nacionales.
Europa Azul