La Comisión de Seguimiento del Langostino analizó la temporada 2025
Y debatió sobre nuevas reglas de captura y ordenamiento pesquero.
Analisis de temporada
De acuerdo con Pescare. La Comisión de Análisis y Seguimiento de la Pesquería de Langostino analizó la temporada 2025 y los resultados de las tres campañas del INIDEP.
El informe confirmó un “muy buen reclutamiento”, rendimientos elevados y una estructura poblacional saludable, mientras avanzan pedidos sectoriales y la discusión sobre nuevas reglas de control de captura.
En la reunión del 28 de noviembre, la Dirección de Planificación Pesquera (DPP) presentó la evolución de los desembarques y de las exportaciones del período 2014–2025 y 2022-2025 respectivamente.
El comportamiento comercial mostró estabilidad y acompañó la tendencia de recuperación observada durante el último año, especialmente en la flota que opera en aguas nacionales.
El INIDEP expuso los resultados de las campañas estival, invernal y primaveral, que permitieron caracterizar la dinámica biológica del langostino (Pleoticus muelleri) a lo largo de todo el año.
Valores
La campaña de marzo mostró valores de biomasa y numerosidad dentro de la serie histórica reciente.
La estructura poblacional fue la esperable para la época del año, con un incremento en el porcentaje de hembras en proceso reproductivo, indicador clave para la sostenibilidad del recurso.
Durante la temporada de pesca, el rendimiento anual nominal fue el segundo más alto de la serie 2017–2025. Las mayores concentraciones se registraron en las Subáreas 7 y 8.
La composición de tallas mostró un claro predominio de L1 y L2, que en conjunto representaron el 76 % de las capturas, mientras que la presencia de juveniles se mantuvo en niveles muy bajos, con apenas 4,95 %.
La evaluación de pre-reclutas y reclutas arrojó una disminución de la biomasa respecto de 2024, aunque con una mayor abundancia de ejemplares juveniles y un incremento de reclutas en comparación con el año anterior.
En noviembre, la biomasa y la numerosidad se mantuvieron dentro de los valores recientes.
Se destacó un núcleo de gran relevancia en el litoral norte y, en la estructura de longitudes, una importante presencia de pre-reclutas y reclutas.
Conclusiones
Los investigadores concluyeron que 2025 fue un año de muy buen reclutamiento, consolidando una señal positiva para el ciclo reproductivo del recurso.
El inicio tardío de la temporada en aguas nacionales, si bien con impacto negativo en lo social, desde la óptica biológica fue un respiro medible por la ciencia del INIDEP.
Se reconoció el rol de los observadores de Chubut y Santa Cruz, quienes participaron en diversas capacitaciones junto a personal del INIDEP.
La mejora en la calidad y consistencia de los datos fue considerada fundamental para las futuras evaluaciones.
También se presentaron los resultados del modelo estructurado en tallas, que confirmó que la población se encuentra en estado saludable, aunque se remarcó la necesidad de avanzar en reglas de control de captura.
Informe técnico
El informe técnico detalló además la evolución del bycatch de merluza al sur del 41° Sur, donde se acumularon 16.000 toneladas.
La presencia del recurso dentro de la ZVPJM fue superior a la observada al norte y por fuera de esa zona. Las mayores relaciones merluza/langostino se registraron al sur del paralelo 44° Sur.
Aun el INIDEP no pudo cuantificar fehacientemente el bycatch dentro de aguas bajo jurisdicción de la provincia de Chubut, algo que se repite a pesar de las administraciones como un coto cerrado entre pesca, provincia y cámaras empresarias.
Durante la reunión, el Grupo Cliente del MSC de Chubut destacó que la gestión de la pesquería ha permitido mantener el stock en niveles saludables, aunque aún quedan ámbitos para mejorar.
CAPIP reiteró su pedido al Consejo Federal Pesquero para elevar al 50 % la proporción de colas de langostino que pueden procesarse a bordo.
CAPEAR-ALFA solicitó que se retomen las propuestas ya elevadas para los fresqueros. UDIPA sostuvo la necesidad de profundizar el ordenamiento de la pesquería y evaluar su impacto ambiental, económico y social.
Más allá de los resultados biológicos y comerciales, los participantes coincidieron en reactivar el proceso de elaboración del Plan de Manejo del Langostino con base en un Enfoque Ecosistémico (EAE).
Compromiso aún pendiente y condición clave para avanzar hacia un esquema de administración integral cuotificada del recurso.
Avance
Este avance constituye el evento más relevante de los últimos meses para la pesquería, dado que años atrás no existía un consenso político-técnico entre los actores respecto de una eventual cuotificación.
y, en paralelo, desde el componente científico persistían brechas de información que impedían sustentar una estimación robusta y trazable de la biomasa.
El trabajo iniciado en 2017 permitió al Departamento de Crustáceos del INIDEP desarrollar y aproximar modelos cuantitativos con mayor certeza y capacidad predictiva para estimar la biomasa de langostino en un contexto de variabilidad ambiental.
Temperatura, salinidad y otros forzantes asociados, incluso, al cambio climático. En este marco, el departamento bajo la batuta de la Lic.Esp. Paula Moriondo Danovaro.
Correlación positiva
Ha demostrado una correlación positiva entre la biomasa total calculada por modelos matemáticos predictivos y la captura total registrada.
Aun cuando la flota ha incrementado de manera disparatada y significativa su capacidad de bodega, metros de eslora nueva y su capacidad de pesca (y, por ende, el esfuerzo pesquero potencial).
El modelo incorpora estos cambios mediante ajustes temporales, manteniendo las estimaciones dentro de un rango relativamente estable de cantidad y consistente con la dinámica reciente de la pesquería.
No se ve representado en ningún gráfico de la Dirección de Planificación Pesquera, por el contrario las unidades parecen muy similares.
Pero sus esloras, cantidad de HP que le da poder de captura y sobre todo, la capacidad de bodega total, ha crecido de manera superlativa.
En síntesis: la capacidad de pesca aumentó, pero eso no se convierte automáticamente en más desembarques.
El sistema se reequilibra por la vía más directa: se ajusta el tiempo.
En aguas de jurisdicción nacional, el resultado es claro: temporadas más cortas y volúmenes que se mantienen en el promedio de los últimos años.
En aguas bajo jurisdicción provincial, en cambio, no se observa un ajuste compensatorio ni en duración ni en volumen.
Allí el límite no lo negocia la administración; directamente por lo que se ve este año, lo impone la biología.
Y ese límite se expresa con contundencia en un techo de captura sustancialmente menor al del año anterior.
Dicho sin rodeos, lo que no ajusta la gestión, lo ajusta la naturaleza., pero eso, será seguramente análisis del próximo año.