Ingresan al Puerto de Comodoro Rivadavia los dos primeros buques de gran porte tras la finalización de las obras de dragado. El sismográfico BGP Prospector, de bandera bahameña, con una eslora (largo) de 100 metros y una manga (ancho) de 24 metros; y el Moonrise G, de bandera panameña, con una eslora de 55,26 metros y una manga de 16,50 metros. El arribo de estos buques marca un hito en la capacidad operativa del puerto, potenciando su rol estratégico en la región. La ampliación del calado permite la llegada de embarcaciones de mediano y gran tamaño durante períodos prolongados.
Los barcos llevarán a cabo operaciones de alistamiento y cambio de tripulación antes de dirigirse a Durban, Sudáfrica, donde ingresarán a dique seco para realizar tareas de mantenimiento. Durante el alistamiento se abastecerán de víveres, agua y combustible. Específicamente, el buque Prospector experimentó condiciones severas en Tierra del Fuego, resultando en algunos daños que requieren reparaciones antes de su próxima fase operativa.