Pesca

Emotiva botadura del “Siempre Don Oscar” y fuerte mensaje de Contessi en defensa de la industria naval

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El Astillero Naval Federico Contessi y Cía S.A. celebró este sábado la botadura número 152 de su historia, con la puesta a flote del buque pesquero costero de doble cubierta “Siempre Don Oscar”. El evento no solo marcó un nuevo hito para el astillero marplatense, sino que también fue un sentido homenaje a la figura de Oscar Martella, referente de la pesca patagónica.

La ceremonia contó con la presencia de su esposa, Cuqui; su hija Liliana, quien fue madrina del buque; su yerno, sus nietos y amigos cercanos. También participaron representantes del sector pesquero, autoridades locales y un nutrido público que se acercó a compartir el momento.

Durante el acto, el presidente del astillero, Domingo Contessi, pronunció un discurso en el que combinó el reconocimiento a Martella con una profunda reflexión sobre la situación actual de la industria naval y pesquera argentina.

“Es una inmensa alegría recibirlos en nuestra botadura número 152. El ‘Siempre Don Oscar’ es un merecido homenaje al querido Oscar Martella”, expresó Contessi.

Críticas al Decreto 273 y advertencias sobre el futuro del sector

En su alocución, el empresario no esquivó la crítica al Decreto 273, que flexibiliza la importación de bienes de capital usados. Lo calificó como una «falacia ideológica» que genera una competencia desleal contra la industria nacional.

“Pretender competir contra bienes de capital amortizados y usados es absurdo. No podemos pagar sueldos usados ni comprar insumos usados. ¡Somos competitivos y queremos competir en igualdad de condiciones!”, remarcó.

También cuestionó el nuevo Régimen de Excepción de la Marina Mercante, al que consideró “un atajo injusto” y “la antítesis de la histórica Jones Act estadounidense”.

Panorama desalentador para la pesca y llamado a la unidad

Uno de los tramos más contundentes del discurso de Contessi fue cuando abordó la crítica situación que atraviesa la pesca, señalando la inacción de los gobiernos nacional, provincial y municipal.

“Hoy tenemos 113 buques congeladores tangoneros paralizados porque la ecuación económica es inviable, y parte del sector sindical se niega a analizar los costos y balances de las empresas”, denunció.

Advirtió que la flota fresquera de Mar del Plata también se encuentra en declive, con barcos que quedan inactivos semana a semana y plantas pesqueras que cierran o promueven retiros voluntarios, tanto en la ciudad como en la Patagonia.

En ese marco, mencionó la paradoja del langostino en Rawson, donde, pese a la abundancia del recurso, los costos operativos son insostenibles.

Contessi fue también autocrítico con el rol del empresariado, al reconocer errores y falta de acción conjunta: “La culpa de lo que está pasando no es de los trabajadores ni de las autoridades. Es nuestra, de los empresarios, que cedimos ante todas las presiones, que hablamos con eufemismos y no somos capaces de unirnos”.

Instó a reconstruir el diálogo con autoridades, sindicatos y proveedores “con datos concretos y sin eufemismos”, e insistió en la necesidad de alcanzar consensos duraderos.

Esperanza y continuidad, pese a las dificultades

A pesar del duro diagnóstico, el titular del astillero reafirmó su compromiso con el trabajo y anticipó que las próximas tres botaduras también serán de buques con asiento en Rawson. “Es un lindo desafío, pero después viene la nada misma”, lamentó, en alusión a la falta de nuevos encargos.

Finalmente, cerró su intervención con un mensaje de esperanza y unidad: “Ojalá que el ‘Siempre Don Oscar’ le dé muchas alegrías a sus propietarios, y que los argentinos encontremos la unión necesaria para hallar consensos perdurables y resolver nuestros problemas con diálogo y sin agresiones”.