Chubut

Empleados de pesquera denuncian persecución por autoridades gremiales

single-image

Un nuevo hecho de presunta persecución por parte de autoridades gremiales fue denunciado por trabajadores de una pesquera de Dolavon, luego de que el micro en el que se desplazaban de regreso a Trelew y Puerto Madryn fuera demorado en un retén policial.

Los empleados, que habían cumplido su turno y volvían a sus casas, criticaron que se les exigió documentación laboral “que debía reclamarse a la empresa oportunamente” y apuntaron contra el Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación “que nos persiguen constantemente y nos sacan fotos porque no estamos afiliadas al gremio”, según precisó una de las trabajadoras.

Además, denunciaron que “desde el gremio nos mandaron a la Secretaría de Trabajo porque seguro no están recibiendo plata por debajo de la mesa” y criticaron que “nos obligan a pagar un ‘aporte solidario’ y si no lo hacemos, nos cierran las puertas de todas las empresas”.

“Teníamos todos los permisos”

En diálogo con El Diario, una de las empleadas de la planta ubicada en Dolavon, Paula Cariñanco, explicó que “lo que nos está pasando es una persecución; nos fueron siguiendo desde Madryn en un auto, vieron cuántas personas habíamos subido al colectivo, donde pueden ir solamente treinta personas; éramos 26,  cuatro subieron en Trelew y el resto en Madryn; yo estoy en blanco, tengo carnét sanitario al día, y todos íbamos con nuestra documentación y con los permisos que nos hizo el encargado de la empresa”.

Además, señaló que “nos siguieron hasta la empresa, vieron cuando bajamos pero no fueron capaces de bajarse y entrar a la planta donde trabajamos, y por lo menos hacer una inspección; tienen que tener una orden judicial y no la tenían, nos siguieron por su cuenta”.

“Nos retuvieron una hora y media”

Por otra parte, explicó que “nosotros trabajamos dos horas y tranquilamente podían haber bajado a la planta y visto cómo lo hacíamos; en una mesa habilitada para que trabajen seis personas solamente lo hacen tres; cumplimos con la distancia reglamentaria, utilizamos barbijos, guantes y todos los elementos de seguridad” y relató que “el tema surgió a la vuelta, donde nos encontramos que a la salida de Dolavon estaban los de, supuestamente, la Secretaría de Trabajo, y la Policía”.

Seguidamente, “nos pidieron todos los datos, nos retuvieron durante una hora y media preguntándonos dónde vivíamos, qué hacíamos, si sabíamos leer y escribir, todas esas cosas; estuvimos todo ese tiempo parados, a nosotros que salimos a ganarnos el ‘mango’”.

El “aporte solidario”

Asimismo, la trabajadora apuntó contra el sindicato y explicó que “el 18 de marzo pasado, yo me quedé sin trabajo por el tema de la pandemia, había trabajado solamente nueve días en una pesquera de Madryn y en la mísera liquidación, hasta ahí nos descontó el gremio; lo que ellos quieren es plata para dejarnos trabajar, no saben de dónde sacarla, quieren sacarle a la empresa para que nos deje trabajar a nosotros” y agregó que “demasiado tienen con las cuotas sindicales que nos obligan a pagarles, porque no es algo voluntario: es obligatorio, si no se hace lo que ellos llaman el ‘aporte solidario’, le cierran las puertas de todas las empresas, no lo dejan trabajan en blanco en ninguna si uno no aporta para ellos”.

“Nunca se preocuparon por nosotros”

La trabajadora lamentó que “todos los días nos topamos con cinco controles en las dos horas de ida y las dos de vuelta; y el sindicato a nosotros no nos da nada, lo que Oscar Hughes (por el secretario gremial del STIA) hizo y hace fue perseguirnos, dice que estamos trabajando en negro e indocumentados, algo que es mentira porque jamás se arrimó adonde estamos, tampoco nos llamó a todos para preguntarnos cómo
estamos trabajando”.

Sobre esto último, advirtió que “él nos mandó a la Secretaría de Trabajo, pero nunca se acercó a hablar con nosotros; detrás de una radio o de un teclado habla y se preocupa por los trabajadores, pero por nosotros nunca hizo nada ni puso la cara”, en relación a la faceta periodística del referente gremial.

 “Revientan a los empleados”

“A todos los trabajadores que quedamos desempleados después de la pandemia nunca nos llamaron ni siquiera para que buscáramos un litro de leche o un kilo de pan para nuestros hijos; el sindicato nos abandonó totalmente, lo único que quieren ellos es dinero del trabajador”, señaló, indignada, la empleada, quien remató: “Son parásitos. Viven del trabajador y a ninguno le han dado una mano. Yo llevo veinte años trabajando en las pesqueras y jamás me golpearon la puerta para preguntarme si necesitaba algo, solamente se preocuparon por descontarnos el aporte de nuestro sueldo. En Madryn hay pesqueras donde ‘revientan’ a los empleados teniéndolos en negro y haciéndolos trabajar entre 18 y 20 horas, pero el gremio no hace ni dice nada, porque los empresarios le pasan un sobre por debajo de la mesa. Y esto viene de toda la vida”, relató.

“Viven de nuestro dinero”

A modo anecdótico, la trabajadora contó que “cuando empecé a trabajar en el año 2000 en Poseidón, hacíamos la denuncia por estos temas y era el mismo sindicato el que iba al empresario y le decía quién iba a hacer el reclamo, nos mandaban al frente a todos” y comentó que “nosotros no dependemos del sindicato, es al revés; en el rubro hay trabajando muchísima gente en negro y ellos hacen la vista gorda, ahora están haciéndonos toda esta persecución porque no les están pasando plata por debajo de la mesa, son unos coimeros; si no les pagamos la cuota sindical no nos dejan trabajar en ninguna empresa”.

En cuanto a lo ocurrido el martes por la noche, mencionó que “nos quieren c…. el trabajo, pero ellos no nos van a pagar las cuentas y poner el lomo como lo hacemos nosotros; se la llevan de arriba y es la realidad, abren la billetera y reciben el dinero que nosotros hacemos trabajando”.

Una “vergüenza”

Otra de las trabajadoras de la misma pesquera, Gladys Molina, relató que “fue una vergüenza todo lo que pasó, fuimos tomados como rehenes porque no había orden ni nada, además de que estábamos en una ruta nacional, y lo peor fue que nos decían que éramos todos ‘indocumentados’; soy argentina, chubutense y trelewense, todos estábamos con la documentación al día y los permisos en mano”.

“Nos quedamos sin trabajo”

“Yo tengo 57 años y necesito trabajar, todos necesitamos trabajar, no somos delincuentes, la mayoría somos
gente grande y nos tuvieron casi dos horas tirados en la ruta, no les importaba nada y nos hacían subir y
bajar del colectivo sin ninguna orden”, lamentó la mujer, quien a su vez sostuvo que “muchos nos quedamos
sin trabajo por culpa de esa gente que nos paró”

Langostino Pesca

Datos preliminares de la pesca de langostino sostienen que “es el mejor noviembre de los últimos años”

single-image

La temporada 2024-2025 de la pesca de langostino inició oficialmente el pasado 3 de noviembre, y durante las dos primeras semanas de actividad, los datos preliminares reportados por el Programa de Observadores a Bordo arrojan resultados alentadores, argumentando que «es el mejor noviembre de los últimos años». Aunque ciertas tendencias llaman «a una evaluación precautoria», indicaron.

Entre el 3 y el 16 de noviembre, los indicadores clave «mostraron un sólido desempeño». Se registró un promedio de pesca de 2.346 kg/h, superando ampliamente el mínimo requerido de 450 kg/h.

En tanto, el bycatch de merluza se mantuvo por debajo del 15%, con un promedio de solo 2%. La proporción de ejemplares menores a L5 fue apenas el 1% de los ejemplares capturados, respetando el límite del 5%. Estos resultados «confirman el cumplimiento de los estándares necesarios para mantener abierta el área de…

Ver más artículos