El presidente de Conarpesa, Fernando Álvarez, ha tomado un rol protagónico en el conflicto por la baja del 30% en el “sueldo por producción”, entre el SOMU y las empresas congeladoras tangoneras.
Fue quien impulsó la reunión en Barcelona para tener una postura única en el sector y hoy asegura que la resolución de este problema está en manos de los tripulantes. Asegura que desde el gremio le están mintiendo a los tripulantes y que deberán darles libertad de acción porque será inevitable que se revelen.
REVISTA PUERTO: Finalmente se presentó la propuesta al SOMU, pero no la acepta y hasta ahora lo único que propone es ir al Gobierno; así lo expusieron en la Comisión de Industria de Diputados.
FERNANDO ÁLVAREZ: A mí lo que me sorprendió es que fueran a una comisión de la Cámara de Diputados a nivel nacional y que mientan. Me quedé sorprendido, sobre todo con Vilar, el secretario general del Siconara, primero porque con el sindicato éramos socios en la mitad de un barco y ellos saben que en los últimos años veníamos perdiendo plata, no puede decir que desconoce eso. Después, que compare los sueldos brutos que pagamos con los precios en góndola en España diciendo que están a 20 dólares. Primero es mentira, pero, aunque estuviera a 20, yo le vendo a 5 o 5 y pico a Mercadona. Esa diferencia no me la quedo yo, se la queda el señor Roig, que es el dueño de Mercadona o el dueño de Carrefour. ¿Cómo puede hacer esas comparaciones? Son gente que cobra fortuna, deberían tener un nivel mayor de conocimiento de las cosas, de investigación de la situación como para ir y poner las cosas claras en semejante organismo. Ellos siempre desconocen nuestros números, nunca han querido verlos ni discutirlos. Lo que se quiere es readecuar el negocio para que sirva, pero bueno, él no lo entiende así y esto se transforma en una guerra que es nada o todo. Tienen que entender que yo no voy a salir a perder 150 mil dólares por marea, por barco, no hay forma.
RP: ¿Le presentó la propuesta a sus tripulantes como había anticipado?
FA: Hicimos un trabajo para calcular un buque de 115 toneladas que en el mes junio del 2024 descargó 348 toneladas porque hizo varios viajes. El marinero de planta se llevó 13,7 millones de pesos en bruto ese año. Mismo mes, misma captura, mes de junio de 2025 se llevaría 12,1 millones de pesos en bruto. Estamos hablando de una diferencia de 1,6 millones aproximadamente menos que el año pasado, que representa mucho menos del 30% porque subió el valor del dólar. No van a tener que pagar para salir a trabajar como dice Durdos. Pescando ganarían 400 mil pesos diarios. Me parece que no estamos haciendo una propuesta de locos cuando en el Garrahan los médicos cobran 750 mil pesos al mes. Hablan de desarraigo, pero tiene seis meses al año sin trabajar, que ahí te puedes ocupar de tu desarraigo, de tu familia, de todo lo que te tienes que ocupar y
hasta incluso, si quieres, de buscar otro trabajo porque sabes que en esos seis meses hay veda y no se trabaja. Entiendo que para los sindicatos es muy difícil ir para atrás con las conquistas, pero tienen que tener en cuenta que esos valores son de hace 20 años, que han pasado muchas cosas, ojalá hoy el langostino valiera 20 dólares en vez de 5 dólares. Pero sí, vale 5 dólares. El problema encima es que al SOMU les asesoran Carlos Liberman y Julián Suárez, Liberman, que en el anterior conflicto como Subsecretario de Pesca nos extorsionó para que llegáramos a un acuerdo y ahora les dice que nos van a hacer sancionar en el Consejo, no se da cuenta de que no tiene el poder que tenía antes, es uno más, se quedó con el chip de aquella época y se cree que tiene el poder o querrá mantener los kioscos de aquella época. Hoy el poder lo tienen el Consejo y la Subsecretaría, pero por sobre todo la realidad, esa es la que tiene el poder, y la realidad nos dice que no podemos salir. La prueba está en que los barcos siguen parados.
RP: Es probable que se decida ir al paro por los básicos de navegación en los congeladores y habiendo ya gente en las rutas por el conflicto del langostino, ¿este tipo de medidas cree que servirá para acelerar las negociaciones o propiciará el estallido social?
FA: El SOMU tuvo sus planes y dijeron públicamente que en mayo ya estaban pescando, estamos a 4 de junio y estamos peor. No se juntan ni cuatro barcos para la prospección y entonces lo único que les queda, que es una metodología bastante común, es la violencia. Pues habrá que esperar la violencia y ver cómo nos pega a todos, a mí será al que más le peguen porque soy el que más habla, pero se están peleando con todo el sector que no sale porque se funde. Esto es un camino para empezar a reconducir la actividad y aunque se junten con otros gremios no podemos aceptar cualquier cosa, no podemos subir ni un escalón porque no llegamos. Estamos en el escalón uno y no se ve que lo podamos subir por más que intenten correrlo y no es un capricho mío, no veo ningún barco que salga.
RP: ¿Se puede perder la temporada?
FA: Si no hay una postura intransigente de parte de ellos y se acepta nuestra
propuesta, claro que puede haber temporada. También podemos quedarnos una temporada sin pescar, yo ya me quedé una vez, paré todos los barcos. Pero debemos pensar que hoy la gente ya perdió de ganar entre 15 y 20 millones de pesos porque ellos así lo han querido. Si en marzo hubieran aceptado cuando hablamos con algún matiz o no, hubiera sido una temporada buena o récord y la gente hubiera ganado incluso más que el año pasado, como pasó en Rawson que fue temporada récord de captura y récord de plata en el bolsillo para la gente. El único problema que tuvo esa temporada de plata fue para los armadores de los barcos, que les bajaron mucho el precio y muchas plantas tuvieron muchos problemas, pero eso es culpa de las empresas, no de los marineros.
RP: El secretario de Pesca del SOMU dijo que iban a denunciar en la ITF que están ante empresarios pseudoargentinos que resuelven cuestiones de los obreros en Barcelona. Y, por otro lado, Durdos dijo que la pesca la maneja España.
FA: Se hizo en Barcelona para que estuvieran los dueños de algunas empresas y entiendan la realidad porque si no, saben lo que oyen o leen en los portales. Ayer tuve un zoom con España y me plantearon que hubiéramos hecho ya 2000 toneladas y me preguntaron qué pasaría si el langostino estuviera por debajo de cinco dólares. La contestación fue tajante, les pedí que hablen con sus clientes y les hagan entender que a nosotros nos pagan más o no le vamos a dar el langostino porque si no, no puedo pagar ni a las tripulaciones ni nada. Por eso se hizo en España, para que tomen dimensión del problema. No es que se decía nada en España y no son empresas pseudoargentinas, hay muchas empresas de las que componen el arco que son argentinas y yo estoy entre ellas.
RP: ¿La resolución de este conflicto está en manos de los tripulantes?
FA: Totalmente. Siempre lo estuvo. Pero, aunque no parezca, yo le veo salida, porque hay un submundo de las redes sociales que distorsiona, pero a los que les hemos enviado los cálculos se han quedado descolocados porque ellos pensaban que iban a cobrar mucho menos. Con lo cual tengo fe que la gente empiece a pedir explicaciones. Tengo fe de que pase algo, pero seguramente habrá un conflicto hoy, mañana van a quemar gomas, a mí me tienen con gomas prendidas hace varios días y hasta puede haber situaciones violentas porque ya pasó. Aquí hay poca memoria, pero esto ya pasó, vi una fea hace unos años cuando se tiraron los 500 mil kilos de langostino. Pero eso lo hacen algunos que estos subvencionan para que vayan a hacer quilombo, el común de las tripulaciones, yo creo que ya quieren salir y que no les parece tan desastre esto que se está ofreciendo y ellos mismos se van a revelar.
RP: Tenía la idea de salir con sus barcos bajo las nuevas condiciones, aunque el SOMU no acordara con las cámaras. ¿Por qué no lo hizo? ¿Los tripulantes de sus barcos no quieren?
FA: La gente quiere, pero el otro día un contramaestre de un barco nuestro que lleva 30 años conmigo quiso subir y me dijo que tenía una lista, cuando estaba todo, a las tres horas llamó y nos dijo que habían hecho fotos de la puerta de su casa diciéndole que cuando él no esté, quién la iba cuidar. Ellos dicen que sí, pero no los dejan. Ahora me están llamando del litoral, hay unos 30 marineros esperando que diga cuándo y ellos vienen. Los tripulantes tienen que ir a por su lugar de trabajo y defenderlo porque el sindicato no se lo va a defender y menos en tiempos de elecciones.