El informe de coyuntura de la Subsecretaría de Pesca del mes de enero presenta el resultado de ventas al exterior del año pasado que muestra un saldo positivo y expone claramente que España y China son los mercados de destino. Se incluye captura por barco de las principales especies en 2018, con excepción del langostino, y los primeros desembarques de este año.
El completo informe que presenta el Departamento de Economía de la Subsecretaría de Pesca para el mes de enero incluye el balance final de las exportaciones realizadas durante el año 2018. Muestra crecimiento en toneladas pero especialmente en divisas, como consecuencia del aumento de precios que experimentaron varios productos. En cuanto al destino de las exportaciones España y China son los principales mercados con gran diferencia sobre el resto. El documento incorpora la estadística pesquera 2018 de captura por buque de las principales especies con excepción del langostino y puede conocerse cuáles son los barcos con mejor pesca del año. En cuanto a los primeros desembarques de 2019 comparativamente con enero del año pasado, exhiben una suba en las descargas de calamar illex y una baja en el langostino.
Exportaciones
La información más sustancial del informe de coyuntura de enero siempre está dada por las cifras finales de exportaciones del año anterior. En 2018 se vendieron 489.173 toneladas por un valor de 2.148.595.000 dólares, lo que representa un crecimiento anual del 2,9% en volumen y del 8,6% en divisas. Los crustáceos, con 186.768 toneladas que representaron ingresos por 1.324.428.000 dólares, lideran la lista de productos exportados; se vendió un 1,2% más en volumen y se recaudó un 8,4% más que en 2017. Los siguen los moluscos con 96.648 toneladas por 288.725.000 dólares, un alza del 17,6% en toneladas y del 12,3% en divisas. En volumen, el pescado congelado en presentaciones distintas al filet fue superior a los moluscos con 101.571 toneladas pero se recaudaron 234.074.000 dólares; mientras que de filet de pescado se exportaron 79.576 toneladas por un valor de 257. 235.000 dólares. La conserva tuvo un mejor año: con 1.814 toneladas de preparaciones de pescado se recibieron 8.188.000 de dólares que representan un crecimiento del 5,2% en volumen y del 15,6% en dólares; de conservas de mariscos se vendieron solo 54 toneladas por 931.000 dólares pero ello representa un crecimiento del 4,2% en toneladas y del 144,5% en divisas. De harina de pescado se vendieron 17.291 toneladas, cayendo un 0,6% respecto al año pasado, pero hubo un crecimiento en la recaudación del 6,8% con un total de 20.044.000 dólares, según datos del INDEC.
La información desagregada por especie muestra que de merluza hubbsi se exportaron 93.936 toneladas por 252.136.000 dólares. A pesar de una caída en volumen de ventas del 6,9% el aumento del precio promedio permitió que se generaran ingresos mayores, en el orden del 1,1%. El producto que más cayó en volumen fue la merluza entera (12%), mientras que el filet solo cayó un 0,4%. Ambos tuvieron aumento de precio, en el orden del 11,7% el primero y del 5,9% el segundo.
De merluza de cola se vendieron 7.652 toneladas por 19.053.000 dólares, un aumento del 14,2% en volumen y del 30,5% en dólares. La merluza negra tuvo un importante crecimiento en cantidad de toneladas exportadas: fueron 2.813 toneladas que representan un alza del 27,1%. Sin embargo la caída del precio en un 18,5% explica que los 65.583.000 dólares percibidos no acompañen ese crecimiento en la recaudación que fue solo del 3,6%.
La estrella de la pesca argentina, el langostino, con 185.440 toneladas creció un 1,2% en volumen pero un 8,4% en recaudación dado que se percibieron 1.300.470.000 dólares, debido a una suba del precio promedio del 7,1%. De colitas, bloques y otras presentaciones se vendieron 65.519 toneladas por 503.034.000 dólares, lo cual representa un crecimiento del 3,2% en volumen y del 14,6% en dólares como consecuencia de un aumento del precio promedio del 11%; de enteros se vendieron 119.921 toneladas por 797.435.000 dólares; si bien no hubo variación en las toneladas exportadas, sí en la recaudación en el orden del 4,8% gracias a un aumento del precio de similares proporciones.
De las 92.627 toneladas de calamar que se exportaron, 82.161 correspondieron a calamar entero; 8.372 a vainas y el resto a tentáculos y demás productos; el crecimiento del volumen total exportado fue del 20,5%. El ingreso total fue de 238.167.000 dólares que representó un crecimiento del 30,5%; de esa cifra final 193.875.000 dólares los aportó el calamar entero que aumentó un 50% respecto a 2018. Las vainas, en cambio, con 36.154.000 dólares bajaron en recaudación un 17,7%. El precio promedio aumentó un 8,2% y la suba más importante se dio en el entero (13%).
De centolla no se exportó ni una tonelada más que en 2018 pero un aumento del precio promedio permitió que los ingresos crecieran un 8,9% y en total se vendieron 1.328 toneladas por 23.959.000 dólares. La corvina aumentó un 14% tanto en volumen como en divisas; se vendieron 19.738 toneladas por 27.234.000 dólares.
El abadejo, con 1.257 toneladas por 8.207.000 dólares, tuvo un crecimiento en volumen exportado del 3,3% y en divisas del 22,6% gracias al aumento del precio promedio en 18,7%. Las rayas, otra de las especies protegidas, tuvo una pequeña variación con el año pasado en volumen (0,9% más) exportándose 9.785 toneladas por 32.707.000 dólares que, en cambio, sí representa una importante alza del orden del 23,4%, gracias a un aumento del precio del 22,3%.
Mercados de destino
Los mercados indiscutidos de los productos pesqueros argentinos son España y China; al primero se vendieron 89.765 toneladas por 483.595.000 dólares mientras que al segundo fueron 102.299 toneladas que representaron ingresos por 475.645.000 dólares. La diferencia está dada por el tipo de producto de mayor valor y calidad que requiere el mercado español, básicamente langostino. Muy lejos los sigue Italia con 28.928 toneladas, que generaron 181.103.000 dólares; y luego Estados Unidos, que con 24.143 toneladas desembolsó 150.649.000 dólares. En quinto lugar está Japón con 21.435 toneladas, que representaron ingresos por 104.477.000 dólares; y detrás con 30.906 toneladas se encuentra Brasil que por un volumen mayor generó ingresos menores, 92.808.000 dólares.
Importaciones
Las importaciones se mantuvieron estables en cuanto al volumen pero debió desembolsarse un 3,5% más en dólares durante 2018. En total se compraron 48.919 toneladas por un valor de 222.123.000 dólares. El producto que más requiere nuestro país es la conserva de pescado, salmón rosado y atún básicamente, lo que explica que los principales países proveedores sean Chile y Ecuador. La compra de conservas de marisco, en concordancia con una mayor producción nacional, cayó un 10,6% en volumen.
Desembarques y ránking de barcos 2018
La información presentada en este documento sobre las descargas debe dividirse en dos secciones: por un lado se brinda el detalle de la captura por barco de las principales especies durante todo 2018 y por otro, los datos de desembarques del primer mes del año.
En el ránking de barcos por especie se observa una particularidad en el caso del abadejo, donde en tres planillas distintas algunos barcos se repiten con idénticas descargas. Tomando en cuenta esta singularidad puede concluirse que los barcos que más pescaron fueron el Don Santiago con 387 toneladas; el Florida Blanca con 366 toneladas; el 7 de Diciembre con 316 toneladas; Gaucho Grande con 311 toneladas y el Tozudo con 288 toneladas. En total se descargaron 3.608 toneladas.
Los barcos que tuvieron las mayores capturas de anchoíta fueron el Pucará con 631 toneladas; Siempre Don Conrado con 572 toneladas; Raffaela con 467 toneladas; Calleja con 427 toneladas y Madonna del Mare con 424 toneladas. Luego bajan paulatinamente hasta aquellos que la capturaron como especie acompañante como el Atrevido, que registró 9 toneladas. En total se descargaron 8.579 toneladas.
Las mejores capturas de la pobre temporada de caballa se dieron en el Indómito con 382 toneladas; La Julia con 321 toneladas; Siempre Sara Madre con 305 toneladas; San Juan José 286 toneladas y el Manto Sagrado 276 toneladas. En total se descargaron 4.897 toneladas
En la temporada de calamar que abarca desde el 15 de diciembre de 2017 al el 7 de junio de 2018 se capturaron por parte de los poteros fuera de la ZEE solo 55 toneladas; ya dentro de la ZEE al Sur del paralelo 44º S se capturaron 96.861 toneladas de las cuales 10.057 correspondieron a los arrastreros y 86.861 toneladas a los poteros. Al norte del paralelo 44º S los arrastreros solo capturaron 706 toneladas y los poteros 9.655 toneladas. Sumando las capturas en la Zona Común de Pesca que fueron de apenas 200 toneladas, se llegó a una captura total de 107.865 toneladas. Los meses de mayor actividad fueron enero, febrero y marzo cuando se capturó el mayor volumen, 76.000 toneladas.
Los barcos poteros que registraron los desembarques más altos fueron los Xin Shi Ji, el Nº 89 con 2.462 toneladas; el Nº 95 con 2.438 toneladas y el Nº 92 con 2.349 toneladas; los sigue el Villarino con 2.326 toneladas y el Soho Maru Nº 58 con 2.158 toneladas. Los poteros capturaron en total 96.562 toneladas.
En merluza hubbsi los cinco barcos que más capturaron son fresqueros: el Mircea C, que registró descargas por 3.050 toneladas; el Tozudo por 2.689 toneladas; el Petrel por 2.607 toneladas; el Sirius III por 2.506 toneladas y el Margot que descargó 2.490 toneladas. El primer congelador se ubica en el noveno lugar; se trata del Itxas Lur que desembarcó 2.326 toneladas. En total se descargaron 265.897 toneladas.
Los desembarques de centolla se concentran básicamente entre 5 barcos a pesar de que son 12 los que registran desembarques. De las 2.318 toneladas totales descargadas, 1000 se reparten en partes casi iguales entre los barcos Tango I y II; el Talismán 366 toneladas; el Dukat 302 toneladas y el Chiyo Maru Nº 3 208 toneladas.
De corvina se capturaron 23.433 toneladas y los mayores desembarques provinieron de los barcos Don Escipión, con 1.056 toneladas (que ahora busca ingresar al langostino); el Faro con 921 toneladas; América I con 775 toneladas, el Nuevo Siempre Gaucho con 761 toneladas y el Vázquez Hermanos con 667 toneladas.
Las capturas de merluza de cola, que llegaron a 37.598 toneladas, se concentraron en dos barcos, el Tai An que desembarcó 19.503 toneladas y el San Arawa con 12.039 toneladas. Muy por detrás están el Echizen Maru con 3.072 toneladas y el Carolina P con 1.158 toneladas.
Primeros datos de desembarques de 2019
En el primer mes del año se registraron capturas totales por 54.651 toneladas, un 2,5% menos que en enero del año pasado. El calamar tuvo un excelente inicio de temporada y con 21.948 toneladas superó los registros del año pasado en un 24%. En el caso del langostino la situación es diferente, las 16.523 toneladas desembarcadas representan una caída del 22,9% en relación a igual período del año pasado. Otra especie que registró una fuerte baja fue la merluza hubbsi: el stock Sur con 6.657 toneladas representa una caída del 23% respecto de las capturas de 2018. La merluza de cola, en cambio, tuvo un crecimiento en los desembarques muy elevado, del orden del 251% con 3.286 toneladas desembarcadas.
En la captura por tipo de flota se destaca el buen momento de los poteros, que pasaron de 349 toneladas en 2017 a 17.583 en 2018 y 21.688 este año. Los costeros, con 18.696 toneladas, bajaron 2.000 toneladas en relación al año anterior; los fresqueros con 7.356 bajaron 1.500 toneladas y los de rada o ría han tenido el peor de los tres últimos eneros, pasando de 4.600 toneladas a solo 832. Los congeladores se mantienen estables con 1.191 toneladas.
Como viene ocurriendo en los últimos años gracias a la abundancia del langostino, Rawson en esta época del año lidera la actividad en puerto. Con 16.508 toneladas se coloca por encima de Mar del Plata, que registra 13.344 toneladas. De todos modos en ambos los desembarques cayeron; en el primero en más de 4.000 toneladas y en el segundo en 2.000 toneladas. Puerto Deseado con 11.916 toneladas, Ushuaia con 3.722 y Puerto Madryn con 4.813 toneladas han crecido en desembarques en relación a 2018 gracias a la buena temporada de calamar, destacándose Puerto Madryn que duplicó los desembarques. San Antonio Oeste, en cambio, es un lamento: 22 toneladas se llevaban descargadas al 31 de enero.
Revista Puerto