INIDEP Puerto Madryn

El director del INIDEP aseguró que “estamos preparados para evitar crisis pesqueras”

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Argentina atraviesa un momento complejo en su industria pesquera, pero no por falta de recursos. Otto Wöhler, Director Nacional de Investigación del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), explicó que el país cuenta con herramientas para evitar crisis biológicas en sus pesquerías. Sin embargo, la actual situación tiene más que ver con desequilibrios macroeconómicos que con problemas en el mar.

UNA CRISIS QUE NO ES BIOLÓGICA, SINO ECONÓMICA

“Nosotros, desde el INIDEP, nos dedicamos a prevenir crisis biológicas en los recursos pesqueros. Y hoy podemos afirmar que no hay crisis de recursos. La merluza, el langostino y el calamar están en niveles sostenibles. Lo que estamos viviendo es una crisis generada por factores macroeconómicos que han desbalanceado el sector”, señaló Wöhler.

Si bien considera que la situación es reversible, advierte que será necesario un trabajo conjunto entre el sector privado, el científico y, fundamentalmente, el gobierno. “Sin medidas económicas específicas, es difícil revertir una crisis de este tipo. El esfuerzo del sector es clave, pero necesita un acompañamiento desde el Estado”, agregó.

CERTIFICACIÓN Y VALOR AGREGADO: DOS CLAVES PARA EL FUTURO

Desde el INIDEP, uno de los focos de acción para sostener la competitividad pesquera ha sido el refuerzo del área de certificación de pesquerías. “Estamos trabajando con cinco proyectos de mejora y con casi tres pesquerías certificadas, incluyendo el langostino de esta zona. Esto ayuda a que el sector pueda mantener su presencia en los mercados más exigentes”, explicó.

Pero Wöhler también pone la mirada en el desarrollo tecnológico como un camino clave para el futuro. “Argentina debería impulsar iniciativas para generar productos de alto valor en el mercado. No hablo solo de filetes con o sin piel, sino de cosméticos, fertilizantes y biofertilizantes derivados de los desechos de la pesca”, sostuvo.

Un claro ejemplo es el desarrollo de antioxidantes a partir de erizos de mar, un proyecto que se estudia en Puerto Madryn con aplicaciones en la industria de la salud y la cosmética. “Este tipo de productos suelen estar menos afectados por crisis económicas porque tienen una demanda global constante y con alto valor agregado”, concluyó.

Fuente: ADNSur