Langostino

Langostino nuevamente a pleno en Chubut

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Tras el receso navideño, la flota volvió con muy buenas capturas y mejores tallas frente a Rawson.

Pero la falta de compradores y fallas de control tensan toda la cadena.

Pesquería de langostino

De acuerdo con Pescare. Luego del receso por Navidad, incorporado por primera vez esta temporada, la pesquería de langostino en aguas bajo jurisdicción de la provincia del Chubut reabrió con una señal positiva.

La flota retomó operaciones y encontró respuesta inmediata del recurso.

Desde el mismo 26 de diciembre, y en plenitud, el 27 y el 28, se completaron bodegas con muy buen marisco en el perfil cercano a Rawson, próximo a la costa, en el norte y con más dispersión al Este de esa localidad a una hora de navegación.

Consolidando un perfil de capturas sobresaliente y mejores tallas, un dato que eleva el valor potencial del producto y ordena la ecuación industrial.

Caída de la merluza

En ese mismo marco, otro dato se volvió central por su peso técnico y ambiental, en las últimas 72 horas se registró una caída marcada del incidental de merluza.

Ubicándose —según reportes recogidos en el circuito operativo— dentro de los parámetros más bajos observados. En términos de campaña, es un indicador que fortalece la lectura de un momento favorable de selectividad y sostenibilidad.

Dos alertas

Sin embargo, el reinicio también expuso dos alertas que no pueden relativizarse.

Por un lado, falta de control en la aplicación de la Resolución CFP Nro.7/2018, ya que se mantiene como práctica común que parte de la flota de Rawson anticipe y prolongue operaciones más allá de la franja prevista (07:00 a 19:00).

Con jornadas que suelen extenderse hasta las 23:00 o 24:00; aunque ayer no habría sido el caso, el punto crítico es la repetición del desborde y su impacto sobre la norma, además de escenarios de AIS en OFF.

E ingreso al AIER cuando no se encuentra marisco cerca, aunque no es el caso de estos tres últimos días.

Por otro lado, en la descarga se reportaron, según integrantes del circuito de estibadores, cajas con volúmenes que exceden el máximo permisible de 18,06 kilos por unidad.

Un desvío que afecta trazabilidad y condiciones comerciales. Al momento la zafra en la temporada 2025-2026 arroja un saldo de 40.000 toneladas descargadas al 28 de diciembre.

Pero el problema principal hoy no está en el mar, nuevamente la venta comienza a hacerse pesada.

La falta de compradores capaces de absorber semejante volumen en un contexto donde las cámaras comienzan a colmarse.

Y el mercado internacional vuelve a mostrar desinterés, reactivando la tendencia a la baja en precios post festividades.

En paralelo, desde el lado extractivo se intentaba modificar el precio del marisco en boca de bodega.

Lo que agrega fricción en un escenario ya de fondo delicado.

Según fuentes consultadas, el mayor jugador en compras termina siendo Newsan.

Mientras otros operadores ajustan por tiempo el inicio del freno comercial estirando pagos al productor de hasta 90 días.

Ese corrimiento financiero trasladó la tensión al punto más sensible, el cobro de lo capturado.

Con buena pesca y caja lenta, la cadena completa se endurece.

Y el conflicto deja de ser hipótesis para convertirse en amenaza concreta, con un desenlace incierto si la comercialización no reacciona con rapidez.

Y si el control no vuelve a ser visible, parejo y efectivo.

Pesca Chubut