Diciembre y enero suelen ser los dos meses de mayor volumen de capturas en las últimas temporadas de langostino en aguas de Chubut, pero a diferencia de las anteriores ahora hay limitantes y restricciones impuestas por la pandemia.
La temporada empezó tarde, la primera prospección de noviembre de 2020 no fue buena, tras lo cual se impuso una parada biológica, y después de otro relevamiento se abrió la pesquería alrededor del 20 de noviembre.
En principio se empezó a pescar casi sobre las 12 millas, zona en que se encontraban las mejores concentraciones con pescado de buen tamaño, el cual ingresaba desde el AIER.
Lances
Al revisar los desembarques se observa que en noviembre pasado se descargaron algo más de 8 mil toneladas, contra las 10 mil del mismo mes de 2019, y en diciembre pasado rondaron las 16 mil toneladas, contra las 20 mil de diciembre de 2019. Hubo un descenso, pero no tan significativo, más teniéndose en cuenta que hay restricciones operativas de la flota por los protocolos de la emergencia sanitaria, aunque en términos de estado de recurso, se mantiene en volúmenes similares a la temporada anterior.
Al concluir la segunda quincena de enero de 2021, con información de REVISTA PUERTO, los lances de la flota que opera en los muelles de la capital chubutense reportan predominio de L3 (50% aprox.); L2 (40% aprox.) y L1 (10% aprox). Los barcos completan capturas en la misma marea, lo cual es un buen indicador de abundancia y concentración del recurso en la zona de operaciones.
A pesar de los condicionamientos y restricciones que impusieron las circunstancias sanitarias se ha pescado bien, señalan desde la flota amarilla. Sostienen que han sido acertadas las medidas restrictivas implementadas al punto de estar trabajando bajo esta ‘nueva normalidad’, que incluye hacer hisopados previos a las tripulaciones. Advierten que en todo el sector se han tomado las medidas preventivas con mucha seriedad y eso se notó en la operatoria, en la que, por ejemplo, ante un caso sospechoso o eventual positivo, se procedió al aislamiento, y se fue incorporando gente para suplir a los apartados, y que la rueda siga girando.
Trabajo en conjunto
Desde el sector destacan que esto ha sido un trabajo responsable de armadores y gremios de maximizar las prevenciones, a fin de minimizar los riesgos, sin tener que llegar a parar la flota, ni paralizar la cadena productiva, que era uno de los principales temores en el arranque de la temporada, ante este inusual escenario que plantea el Covid-19.
En cuanto a la ubicación y desplazamiento del recurso, la flota se concentra en la mitad de aguas provinciales, a unas seis millas de Rawson hacia el sur, lo que permite a los buques completar bodegas en la misma marea.
Con lo que, en términos generales, la temporada de la pesquería de la especie Pleoticus muelleri en aguas de la jurisdicción de Chubut se mantiene “estable”, en cuanto a capturas, y los niveles de abundancia son similares a zafras anteriores, al igual que las tallas y calidad de los ejemplares capturados.