Se lleva adelante este viernes 13, en la sede del Ministerio de Capital Humano de la Nación, el encuentro entre funcionarios nacionales, gobernadores, el intendente de Puerto Madryn y sindicatos del sector pesquero, con el objetivo de encontrar una vía de solución al dilatado conflicto de la flota langostinera. Sin embargo, la pata empresaria a través de CAPIP, CAPECA y CEPA—dueñas de los buques y titulares de los permisos de pesca— no fue convocada a participar de la reunión.
Desde la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP), su presidente Agustín de la Fuente confirmó que no fueron invitados al cónclave. “Me parece que hay una gestión por parte de los gobernadores con los gremios de la tripulación, pero sin atender la cuestión de fondo que venimos planteando hace bastante tiempo”.
El dirigente empresario sostuvo que, si bien toda iniciativa de diálogo es valorada, sin las empresas en la mesa es imposible alcanzar una solución real al conflicto. “Hoy es más una gestión política para generar una mesa, pero no alcanza. No se trata solo de discutir los derechos de exportación o los derechos únicos de extracción. El problema es la pérdida de rentabilidad estructural del sector, que sólo puede resolverse debatiendo los precios de referencia con los que se liquida la producción”.