El gobernador Ignacio «Nacho» Torres señaló este jueves que depende del Consejo Federal Pesquero generar una vía de solución al conflicto entre marineros y empresas.
Afirmó que «nadie modera entre las partes» y que la situación de la temporada nacional de langostino se agrava ante la falta de un ámbito institucional, a nivel nacional, que convoque a un diálogo efectivo. “Intentamos acercar posiciones, pero es muy difícil sin tener competencia, porque la realidad es que esto depende directamente del Consejo Federal Pesquero, y debería reunirse pura y exclusivamente para resolver este conflicto”, afirmó.
El mandatario habló por Radio Splendid de Buenos Aires y describió un panorama complejo para el sector pesquero, tanto en Chubut como a nivel nacional. “La situación está difícil”, reconoció, recordando que durante la última temporada de Rawson ya se habían detectado conflictos gremiales derivados del aumento de costos operativos, la baja del precio internacional del marisco y el atraso cambiario. En ese contexto, la provincia implementó una “mesa de competitividad y paz social” que, según recordó, permitió alcanzar acuerdos y concretar una temporada récord.
Sin embargo, Torres contrastó esa experiencia con el escenario nacional, donde, a su juicio, “no hay nadie que acerque posiciones”. “Llamar a una prospección sin acuerdo previo no tiene sentido porque no va a salir a pescar nadie. Me parece que todos están haciéndose los distraídos y escondiendo la mugre abajo de la alfombra. Este problema hay que encararlo de frente, juntar a las partes, encerrarse en una habitación y ponerse de acuerdo, porque lo que no puede pasar es que no se salga a pescar”, sentenció.
En relación a la necesidad de una estrategia a largo plazo, el Gobernador insistió: “Hay que planificar. El argentino es un mar riquísimo, pero también es un mar riquísimo que nos están robando. Esos poteros ilegales que entran y salen depredan nuestros recursos, y eso ya no es solo una cuestión económica: es una cuestión de soberanía”.
Torres fue enfático al rechazar cualquier intento de flexibilizar el ingreso de flota extranjera o de tripulaciones de otras nacionalidades, advirtiendo que aplicar medidas que favorezcan la descarga en puertos argentinos por parte de buques de bandera extranjera representaría “una amenaza directa a la soberanía”. “Si ya no podemos resolver lo que nos están robando en la milla 201, esto puede ser caótico para el país”, sostuvo.
El gobernador también advirtió sobre otra problemática estructural del sector: la falta de agregado de valor. “Hoy es más barato agarrar los bloques congelados y procesarlos en otros países. Si tuviésemos la inteligencia de acordar entre las partes, muchas ciudades costeras podrían tener pleno empleo. Estamos perdiendo miles de millones de dólares por no generar trabajo acá, y nos estamos pegando un tiro en el pie todos los días con la pesca”, aseguró.