Los domingos es cuando más se eleva el porcentaje de inasistencia laboral, pero también los sábados y feriados. Esa irregular práctica termina trastocando el proceso productivo de las empresas, perdiendo eficiencia y generando sobrecostos. El STIA propone una insólita solución: crear un “premio por ir a trabajar”.
La problemática de los elevados porcentajes de inasistencias que se verifican en las plantas de procesamiento en Puerto Madryn, durante los fines de semana y feriados, está obligando a las áreas de recursos humanos a replantear la metodología de trabajo. Los niveles de productividad caen los sábados y más los domingos, y es una cuestión que se repite año tras año y en cada temporada.
En el inicio de la zafra de aguas provinciales, hace apenas tres semanas, hubo empresas que hicieron firmar a su personal de temporada y eventual un ‘compromiso de asistencia’, bajo apercibimiento de quedar desafectados del vínculo laboral, pero la recomendación no persuadió el cambio de comportamiento.
Esa falta de regularidad lleva a que las empresas empiecen a analizar un cambio en los esquemas de trabajo. En algunos casos pensaron en no sacar los barcos determinados días para no tener cuellos de botella de materia prima sin procesar los fines de semana, pero es una variable difícil de manejar ya que hay días entre semana que no salen por mal tiempo y no pueden organizar una interrupción programada de los días efectivos de pesca.
La situación cruza a la mayoría de las plantas de procesamiento, y esos elevados niveles de ausentismo, representan hoy una distorsión que se provoca a la cadena productiva, ya que trastoca los volúmenes que debieran se procesados en condiciones normales, lleva más tiempo y configura un costo adicional.
La industria pesquera no ha logrado aún, atar de modo concreto los valores remunerativos a los factores de productividad, y con ello, favorecer con mayores ingresos en función directa de lo que producen por día. Si bien existe algún parámetro en ese sentido, no logra cambiar los patrones de conducta en cuanto a las inasistencias elevadas que se producen los fines de semana a los lugares de trabajo.
En ese contexto de incumplimiento, el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación de Chubut, que logró una actualización salarial del 275% en el último acuerdo paritario, propone como alternativa la creación de un “premio por ir a trabajar” los fines de semana. Una alternativa insólita que las empresas del sector desechan como una posibilidad seria y viable; sería un pésimo ejemplo para quienes cumplen y van a trabajar con regularidad ya que se terminaría dando un premio al que ha incumplido con su relación laboral.
Esa mecánica de ‘incentivos’ parciales, que a la postre no son tales sino un elemento distorsivo en el proceso de producción, se ha instrumentado a partir de acuerdos particulares que el STIA cierra con plantas, como premio a la descarga para que sean más eficientes o premio al fresco para diferenciarlo del reproceso de congelado, pero en rigor no ha contribuido a dinamizar la productividad, ni ha contribuido a mejorar las prácticas laborales.
Tal vez desde el sector del trabajo y sus representaciones gremiales no se ha tomado dimensión de la importancia de las fuentes laborales de las que hoy se disponen en Chubut. A la luz de los pedidos de inconstitucionalidad, que tramitan ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, no está muy lejos la posibilidad de que se libere la actual prohibición de sacar materia prima de la provincia y tengan libre tránsito por el país para su procesamiento más eficiente en otras latitudes y jurisdicciones.
Fuente: Revista Puerto