Los rendimientos son sostenidos después de dos meses de capturas. Noviembre fue un mes perdido por el conflicto sindical. Los desembarques diarios rondan los 40 mil cajones. Predomina la talla comercial L2. Las plantas de procesamiento de la región están con actividad plena.
La temporada de pesca de langostino de puerto Rawson que habitualmente comenzaba a mediados de octubre, esta vez se vio demorada hasta los primeros días de diciembre como resultado del extenso conflicto que el sector mantuvo con la marinería y los conductores navales.
En diciembre de 2018 se reportaron desembarques del recurso langostino, pescado en aguas provinciales, por 10.167 toneladas, lo cual empezó a dinamizar la actividad de las plantas de procesamiento de Rawson, Puerto Madryn, Trelew y Comodoro Rivadavia, que sintieron la paralización de la actividad por el conflicto gremial que se destrabó el último día de noviembre.
Enero es, siempre en la zafra de Rawson, el mes de mayor intensidad de capturas, desembarques y actividad de proceso en las plantas y esa tendencia va decreciendo en febrero y marzo. En el arranque de febrero se observa que las plantas tienen materia prima y mantienen además del personal estable, un número importante de trabajadores eventuales, el cual varía en función de la curva de cantidad de pescado disponible para su procesamiento.
Más de 40 mil cajones
En la actualidad son 82, aproximadamente, los barcos de las flotas artesanal y amarilla que se encuentran operando sobre el recurso Pleoticus muelleri, y las marcas se hallan a una hora de navegación del puerto capitalino, con un nivel de abundancia que permite que con pocos lances se complete bodega.
En el momento pico de capturas se llegaron a desembarcar alrededor de 45 mil cajones por día en los muelles de la capital de Chubut, y en febrero está cerca de los 40 mil cajones por jornada, según reportan los registros.
Predominio de L2
El tipo de langostino es de muy buena calidad, no solo por el tamaño sino también por sus condiciones exoesqueléticas (cáscara firme), y los lances presentan baja, casi nula, presencia de fauna acompañante, hasta la fecha.
Sobre fines de enero y comienzo de febrero se mantenían lances con predominio de langostino L2, y en menor porcentajes L1 y L3, en ese orden.
Las plantas están todas abastecidas por la flota. Además, se debe tener en cuenta las nuevas reconversiones, los tres nuevos barcos que se incorporaron a la flota amarilla y los reemplazos que se hicieron en la flota artesanal.
El relevamiento realizado por la Secretaría de Pesca de Chubut sobre el momento pico de la actividad pesquera en zafra de langostino con todas las plantas de procesamiento activas y la flota operando en pleno, y en cuanto a personal el SOMU, SUPA, Siconara, STIA y el transporte contabilizaban alrededor de 7500 empleos en forma directa en toda la industria pesquera. Esa cantidad desciende en baja temporada porque la actividad es menor y se terminan los contratos de los trabajadores eventuales. Otro momento alto del año es cuando se opera sobre el recurso en aguas nacionales y las descargas de los barcos colorados de la flota fresquera de altura provee de materia prima a las plantas.
Evolución en una década
Con todo, el año 2018 cortó los registros récords que el puerto de Rawson venía mostrando en materia de desembarques de langostino con la extraordinaria cifra de 74.925 toneladas que se descargaron en 2017, y que es por ahora el pico histórico de ese puerto para Pleoticus muelleri.
Los registros oficiales de desembarques exhiben con claridad esa tendencia creciente, tanto por el incremento de flota, como también y principalmente por la sobreabundancia de la especie. En los muelles de la capital de Chubut se descargaron en 2008 apenas 3.762 toneladas de langostino. Al año siguiente, en 2009, se contabilizaron 3.956 toneladas.
El salto exponencial se verificó en 2010 cuando los desembarques del crustáceo llegaron a 14.406 toneladas, y el año siguiente, en 2011, hubo un nuevo récord con capturas por 19.316 toneladas.
En el año 2012 hubo un pequeño retroceso, pero igualmente el volumen era alto para la actividad extractiva de langostino, con 15.768 toneladas. Desde allí el crecimiento fue sostenido y geométrico. En 2013 los partes de descargas de esa especie, en Rawson, ascendieron a 20.964 toneladas. Al año siguiente, en 2014, llegó a 33.456 toneladas; y en esa escalada, en 2015 los desembarques se incrementaron a 38.204 toneladas.
La tendencia continuó en alza en 2016 con 47.686 toneladas pescadas por la flota que descarga en la capital de Chubut; y el récord histórico tuvo lugar en 2017 cuando las toneladas declaradas del “rojo naranja” treparon a 74.925 toneladas.
En tanto, en 2018 todo indicaba que los registros iban a ser similares o incluso se volvería a romper la marca, pero la paralización completa de la flota en octubre y noviembre, por el conflicto laboral, repercutió en las descargas que descendieron a 62.590 toneladas. El dato se comprende acabadamente al comparar el último trimestre 2017 (oct/nov/dic) con 27.149 toneladas, contra las 11.927 toneladas de idéntico periodo de 2018.
Revista Puerto