Walter Uribe, coordinador General de Puertos en Santa Cruz, trazó un panorama luego del fenómeno climático que afectó principalmente a Caleta Paula y Deseado. “No hubo derrames y ya se trabaja en el reflotamiento”, anticipó sobre las tres embarcaciones hundidas.
Son horas intensas para Walter Uribe, el coordinador General de Puertos en Santa Cruz y quien dirige la Unidad Ejecutora Portuaria en la provincia patagónica. Como el viento que azotó la región en los últimos días y provocó el hundimiento de tres embarcaciones de la flota artesanal en Caleta Paula y daños de menor importancia en flota e instalaciones portuarias.
“Los puertos más afectados fueron Caleta Paula y Puerto Deseado donde dañó instalaciones portuarias, derribó alambrados, voló chapas y tiró columnas de alumbrado. Si bien había un pronóstico que anticipaba vientos de hasta 120 kilómetros por hora, tuvimos ráfagas de hasta 180 kilómetros”, cuenta Uribe.
La flota amarilla en Caleta Paula se compone de 17 barcos, entre los cuales estaban el “Yakisa”, el “Barracuda” y el “Alborada”. Todos estaban en el Sitio 1 y Sitio 2, donde amarra siempre dicha flota. “El primero en hundirse fue el ‘Barracuda’ que estaba con trabajos finales para poder salir a pescar, y arrastró a los otros dos”, explicó Uribe.
Dos de los tres barcos se supo que pertenecen a un mismo armador, el cual comparte sociedad en el tercero. Uribe estuvo en contacto de manera permanente con el propietario para planificar las tareas del día después.
“Ya convocaron a una empresa de alistamiento de Madryn, está viajando para acá (por Caleta Paula) para las primeras evaluaciones. Seguramente van a trabajar con dos grúas en simultáneo desde el muelle para poder reflotarlos”, anticipó el Coordinador.
En ese sentido, Uribe remarcó que “por suerte no hubo derrames de combustible, se perdieron algunos cajones porque el ‘Alborada’ y el ‘Yakisa’ estaban operativos. El resto de la flota amarilla, había un grupo en el mismo Sitio 1 y el resto en el Sitio 2, que se golpearon un poco, pero no sufrieron los daños que tuvimos que lamentar con estos tres barcos”.
En estas horas desde la Unidad Ejecutora están haciendo un informe con el relevamiento preciso de todos los daños provocados por el fenómeno climático, el cual será girado al Ministerio de la Producción para comenzar con las obras de reconstrucción. “Tendremos una idea del costo económico de todo esto una vez que recibamos los presupuestos; hablar de una cifra ahora es hacer futurología”, expresó el funcionario provincial.
Sobre las características del fenómeno, Uribe indicó que según lo que le habían explicado algunos especialistas, se trató de un ciclón. “Acá estamos acostumbrados al viento; soportamos todos los años un par de eventos donde sopla a más de 100 kilómetros por hora y nos preparamos para afrontarlo sin mayores consecuencias. Esto que pasó ahora estaba fuera de todo cálculo”, remarcó.
Fuente: Revista Puerto