Temporada de calamar promete. De manera contraria a lo que muchos pronosticaban, los primeros buques que comenzaron a operar al sur del paralelo 49º, en busca de calamar, han tenido un inicio prometedor. Según informes de fuentes confiables, las capturas diarias de estos primeros días oscilaron entre las 50 y 70 toneladas, lo que ha generado un panorama optimista tanto en el sector pesquero como en las comunidades locales. Este éxito inicial refuerza las expectativas para la temporada, que ha comenzado con un buen pie a pesar de las dudas previas sobre las condiciones del mercado y las poblaciones de calamar.
Este panorama positivo continuó ayer cuando un pequeño grupo de barcos de la flota potera comenzó a desplazarse hacia el norte, ubicándose un poco más arriba de Puerto Deseado. En esa zona se detectó una gran concentración de calamar, lo que disparó las expectativas de los pescadores y expertos. Sin embargo, los resultados concretos de estas nuevas capturas solo se conocerán mañana, cuando se evalúen los informes de los barcos que han estado operando en esta área.
Fuentes que se comunicaron con Mar&Pesca ayer se mostraron satisfechas con los resultados obtenidos hasta el momento. Además, anticiparon que en los próximos días se incrementará significativamente la cantidad de barcos que se sumarán a la pesca en la región. “Estimamos que para el 12 de enero, ya todos los buques estén en el agua, ya que ese día se abre la pesca al sur del 44º para toda la flota”, señalaron, lo que marca un hito importante en la temporada y una expansión de la actividad pesquera, según publicó Mar y Pesca Noticias Patagónicas.
La temporada de calamar es una de las más esperadas por los trabajadores del sector, dado que las descargas generan un dinámico circuito económico en el que participan todos los eslabones de la cadena pesquera. Desde estibadores, comerciantes y proveedores hasta marineros, operarios de planta y camioneros, todos se benefician de las capturas, lo que hace de este periodo una de las épocas más activas y vitales para la economía regional.
Este buen inicio de temporada, acompañado por la perspectiva de una mayor cantidad de barcos y capturas, augura una temporada positiva para el sector pesquero del sur argentino, con implicaciones económicas no solo para la industria primaria sino también para los trabajadores y comunidades que dependen de este sector clave.