Temporada de Pesca 2025. Los momentos que atraviesa la pesca y todo el complejo manufacturero y exportador; no son fáciles. Un año 2024 marcado por la incertidumbre de no saber cómo enfrentar el futuro de la pesca. La angustia y desazón entre la falta de penetración en los ámbitos gubernamentales del 8vo. complejo exportador argentino con algo más del 2.5% del total de las exportaciones anuales, no termina de tener su representatividad dentro del escenario del vértice político argentino, que desconoce lo que la pesca hace, invierte y genera.
El puerto de Mar del Plata, con miles de zarpadas a lo largo de 100 años de historia, con una tradición merlucera por excelencia y un marco de deterioro estructural desde el nuevo paradigma impuesto por las actuales autoridades económicas y políticas del país, es el escenario, casi para una nueva aventura. La temporada de pesca 2025.
Entre presiones gremiales, mercados decididamente sin demanda y con precios presionados a la baja, los deterioros de márgenes brutos para enfrentar las presiones tributarias terminan por poner en terreno deficitario la actividad.
Asimismo, y en tal sentido, con la solemnidad que merece y el entusiasmo que enciende cada nuevo comienzo, ayer a las 13:00 horas, zarpó desde el puerto de Mar del Plata el buque pesquero congelador Ponte de Rande, marcando el inicio oficial de la temporada de pesca 2025. Este acontecimiento, impregnado de tradición y expectativas, se convierte en un símbolo del esfuerzo colectivo y la esperanza de una próspera temporada donde la pesca sabe que se inicia no con las mejores expectativas. Los mercados condicionan la actividad, pero al mismo tiempo el pescador, el armador doblega esfuerzos por encontrar como adaptar mejor su empresa en momentos críticos. La pesca está en crisis.
El Ponte de Rande, reconocido por su imponente estructura y eficiencia operativa, se dirige hacia los prolíficos caladeros que han nutrido durante décadas la economía pesquera de nuestra región. La partida de este emblema del sector no solo representa el inicio de una travesía marítima, sino también el comienzo de un ciclo lleno de desafíos y oportunidades para todos quienes forman parte de esta noble actividad, según publicó Pescare.
La escena del zarpe estuvo acompañada de un clima de cordialidad y camaradería, pero de mucho trabajo para el incansable Rubén Agüero que, con su equipo de operadores de muelle, lleva adelante el desafío de la dirección “en boxes” de cada barco; con la responsabilidad de no demorar y coordinar cada tarea de alistamiento que conlleva a la resultante eficiencia pesquera.
Bajo un cielo que alternaba entre destellos de sol y un sostenido viento Noreste aportando brisa marina y salobre al aire de mar en el muelle, trabajadores a bordo, con destreza y la vocación de llevar adelante una nueva marea que les permita dar sustento a sus familias, encaran una nueva temporada de pesca en el Atlántico Sur. Desde el muelle, se escucharon palabras de aliento y gestos de afecto sellando este momento cargado de significado y emoción.
En cada temporada de pesca, se renuevan los compromisos con la sostenibilidad, la calidad y la excelencia, valores que guían el quehacer del sector pesquero, junto a la responsabilidad que lo producido es materia prima nutricional y alimento para miles de habitantes en lejanos países del mundo.
Este año no es la excepción, y la industria reafirma su voluntad de contribuir al desarrollo económico del país respetando los recursos, el medioambiente, con la esperanza de menores erogaciones tributarias y el desafío de balances nuevamente en azul que permita reciclar utilidades engrosando la industria pesquera, naval y todo el clúster de la pesca que de Él dependen.
La salida a pesca del Ponte de Rande no solo inaugura un período de arduo trabajo, sino también de confianza en el futuro. Que los vientos favorables y las aguas generosas acompañen a su tripulación y que esta temporada 2025 sea recordada como un capítulo de éxito y progreso para nuestra comunidad pesquera.