En Mar del Plata, inspectores municipales intervinieron en un domicilio particular que oficiaba de planta de procesamiento. Decomisaron 200 kilos de pescado y calamar.
A los inspectores municipales del Departamento Pesca parece habérseles terminado la paciencia de manera repentina y en menos de una semana clausuraron tres plantas de procesamiento clandestinas de pescado que funcionaban sin habilitación ni condiciones mínimas que garanticen la conservación de la materia prima.
Ayer el operativo del que participó personal de la Delegación Municipal, se centró en un predio ubicado en San Salvador 4217. Una casa particular que cumplía funciones de planta de procesamiento.
Durante la intervención el personal de control decomisó alrededor de 200 kilos de materia prima, mayormente merluza y calamar, que fue decomisado y derivado a la harina tras haber perdido condiciones mínimas para su consumo.
“Si bien las condiciones higiénicas eran aceptables, las instalaciones complementarias eran inexistentes”, aseguraron desde la Municipalidad al tiempo que tras la clausura derivaron las actuaciones a la Justicia de Faltas.
El funcionamiento del lugar provocaba molestias y el malestar de los vecinos del barrio, quienes denunciaron la operatividad clandestina ante la propia Delegación Municipal.
El último párrafo del comunicado municipal parece más destinado a otros cuentapropistas que trabajan en la clandestinidad en las calles del puerto.
“Se recuerda que ante cualquier duda, el Departamento de Pesca brinda el correspondiente asesoramiento para la instalación de establecimientos de procesamiento de productos pesqueros dentro de las normas vigentes”.
Si desde Pesca y la propia Delegación siguen respondiendo a las denuncias que formulan los vecinos, la lista de plantas clausuradas se ampliará en los próximos días.
Revista Puerto