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Adjudican áreas offshore y no está terminado el mapeo de zonas pesqueras

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Se dio apertura a las ofertas para la exploración costas afuera en el Mar Argentino y en un mes se realizarán las adjudicaciones para tres áreas, dos de las cuales involucran zonas pesqueras. Se trabajó en un mapa de condiciones biológicas para evitar afectar los desoves pero aún no está terminado. Tampoco se sabe si se harán las tres prospecciones básicas de sensibilidad ambiental.

La Secretaría de Energía de la Nación realizó la apertura de las ofertas del Concurso Público Internacional Costa Afuera para la exploración de tres cuencas de la plataforma marítima continental argentina en busca de gas y petróleo. Se presentaron 13 empresas, que ofertaron USD 995 millones por 18 áreas. Dos de las tres cuencas involucran zonas de actividad pesquera. La Secretaría de Energía había comenzado a trabajar en un mapeo con el INIDEP para determinar las zonas y épocas del año en la que se podría realizar la actividad sin afectar a la pesca, pero por el momento esa tarea no se ha concluido. Por otra parte, como ocurre en todo el mundo, es imprescindible que se realicen las prospecciones de sensibilidad ambiental antes, durante y después de la actividad sísmica; pero hasta el momento nadie ha hablado al respecto.
Durante el próximo mes el Gobierno Nacional realizará la adjudicación de cada una de las áreas ofertadas en las cuencas. Del total de empresas que realizaron ofertas, hay cuatro que hasta hoy no contaban con operaciones en el país: Mitsui, BP, ENI y Tullow. El listado de ofertantes se completa con Qatar, Equinor, ExxonMobil, Total, YPF, Shell, Pluspetrol, Tecpetrol y Wintershall.
Desde la década del 70 el país cuenta con plataformas de exploración y producción offshore. En el año 2018 el 18% de la producción de gas provino de áreas costa afuera. La controversia con las nuevas áreas que se adjudicarán es que se ubican en espacios donde se desarrolla actividad pesquera, especialmente en el sector patagónico.
Las cuencas Austral Malvinas y Malvinas Occidental se ubican frente a las costas de Santa Cruz y Tierra del Fuego donde habitualmente se capturan especies australes de gran valor, como la merluza negra y el calamar illex.
Una de las formas de proteger a las especies pesqueras en la convivencia con la explotación offshore es determinar los momentos de reproducción y paso de la especie por esas áreas. Para ello el INIDEP mantuvo contacto con la Secretaría de Energía, con la intención de avanzar en un mapeo de espacio y época recomendadas, pero hasta el momento, según confirmaron desde la Secretaría de Energía, el estudio no está concluido.
Al respecto el investigador Adrián Madirolas, cuando se tomó conocimiento el año pasado sobre el llamado a licitación, indicó a REVISTA PUERTO que el impacto sobre los recursos depende de dónde se ubiquen las prospecciones y en qué momento del año se realicen, algo con lo que sería imprescindible contar antes de que las petroleras comiencen las exploraciones.
“Lo primero que se debe tener es un mapa de sensibilidad ambiental en materia pesquera, donde uno pueda volcar en ese mapa, con cierta periodicidad estacional, qué actividades biológicamente sensibles se desarrollan en distintas regiones”, señaló Madirolas. Agregó que “esto es lo primero que se debe mirar, vamos a tener durante cuatro años seguidos prospecciones sísmicas, dónde y cuándo”.
El investigador señaló entonces que era muy importante a partir de conocer la zona en la que se va a realizar actividad petrolera, “reglamentar la época de las prospecciones”, algo que hasta ahora nunca se hecho. Por otra parte señaló que es de gran relevancia saber cuántos días va a durar la prospección.  “La contaminación sonora no se produce solo por la intensidad del sonido que es muy fuerte sino durante cuánto tiempo se produce”, señaló, aclarando que si el barco se queda un mes ello puede tener impacto sobre los peces.
Según los estudios realizados en el mundo el mayor impacto se da sobre los peces, mientras que moluscos y crustáceos sufren un impacto de mínimo a nulo. Los impactos más fuertes se han visto en peces. Cuando el buque de sísmica genera una burbuja de aire que explota en el fondo el sonido se propaga y los peces lo perciben a 100 kilómetros a la redonda y normalmente se alejan. Si el impacto dura dos días los peces vuelven; pero si se extiende por un mes pueden cambiar de zonas. Dependiendo en la época en que esto suceda, puede obligarlos a alejarse de su zona de desove generando un grave perjuicio en el reclutamiento.
Es por estos motivos que la generación de un mapa de condiciones biológicas es de gran importancia, dado que permite, según señaló el investigador, “poner las cosas en una perspectiva general, en cuanto a un enfoque precautorio, es la primera herramienta para saber si acepta o no la prospección sísmica. Yo supongo que si esto termina en una normativa, como sería esperable, si se solicitara una prospección en una época y zona altamente sensible para una especie de interés, debiera denegarse”.
Por otra parte Madirolas señaló que para medir el impacto de la prospección se deben hacer estudios de sensibilidad ambiental, algo que se hace en el mundo desde hace 40 años. Se deben realizar al menos tres campañas para medir parámetros oceanográficos, fisicoquímicos, distribución y abundancia de peces, la fauna de mamíferos, desde las aves hasta el bentos. La primera debería realizarse inmediatamente antes de la sísmica; otra durante la sísmica y la última inmediatamente cuando termina; y en el caso de que se observe un impacto se puede pedir una cuarta.
La Subsecretaría de Pesca debiera estar atenta a que se cumplan las condiciones básicas para evitar que la exploración costas afuera genere un impacto sobre la actividad pesquera, dado que no ha sido incluida en la normativa la obligación de realizar las campañas. El INIDEP cuenta con los recursos técnicos y humanos para llevarlas a cabo, pero dependerá de la capacidad de las autoridades y del interés que tengan por preservar los recursos que finalmente se manejen bajo parámetros de sustentabilidad.
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Langostino Pesca

Datos preliminares de la pesca de langostino sostienen que “es el mejor noviembre de los últimos años”

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La temporada 2024-2025 de la pesca de langostino inició oficialmente el pasado 3 de noviembre, y durante las dos primeras semanas de actividad, los datos preliminares reportados por el Programa de Observadores a Bordo arrojan resultados alentadores, argumentando que «es el mejor noviembre de los últimos años». Aunque ciertas tendencias llaman «a una evaluación precautoria», indicaron.

Entre el 3 y el 16 de noviembre, los indicadores clave «mostraron un sólido desempeño». Se registró un promedio de pesca de 2.346 kg/h, superando ampliamente el mínimo requerido de 450 kg/h.

En tanto, el bycatch de merluza se mantuvo por debajo del 15%, con un promedio de solo 2%. La proporción de ejemplares menores a L5 fue apenas el 1% de los ejemplares capturados, respetando el límite del 5%. Estos resultados «confirman el cumplimiento de los estándares necesarios para mantener abierta el área de…

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