La visita del embajador Daniel Scioli a la ciudad de Puerto Madryn aumentó las expectativas de la industria pesquera de incrementar notablemente las exportaciones al Brasil, en un contexto poco favorable al que afecta también la guerra entre Rusia y Ucrania. El titular de la empresa Estrella Patagónica, Ventura Lafuente, manifestó la intención de que el mercado brasileño pueda suplantar al de los dos países que se encuentran en conflicto: «Brasil siempre es un mercado interesante, son 200 millones de personas con un poder adquisitivo bueno para el tipo de producto que hacemos. Pero ahora es más interesante porque nosotros teníamos un mercado en Europa que está debilitado, el ruso y el ucraniano desaparecieron y, además, este conflicto hace que Europa tenga problemas como la inflación y la caída del consumo».
Así las cosas, la intención de exportación al Brasil es subir al 2 o 3 por ciento del total de las exportaciones.
Caída de China
De todas maneras, la esperanza es que la guerra finalice en poco tiempo, con lo cual «nosotros vendemos alimento y deberíamos tener una recuperación rápida, pero no lo sabemos y estamos en medio de una incertidumbre complicada», dijo Lafuente. Otro mercado que había caído drásticamente por la pandemia fue el chino que, si bien se ha recuperado, no ha llegado a los niveles pre pandemia: «China se recuperó, pero no como era. Ellos están llevando producto, pero el mercado que en algún momento fue ya no se recupera más. También las condiciones sanitarias de China son muy fuertes y mucha gente no lo pudo soportar, entonces bajó muchísimo el volumen«.
Aumento del petróleo
Otro factor que influye en la industria pesquera es el incremento en el valor del petróleo, básicamente porque incrementa mucho los costos a la hora de salir a pescar. El titular de Estrella Patagónica dijo al respecto: «Esto incide muy negativamente, la situación del petróleo repercute directamente en el precio. En la industria en tierra se podrá ir manejando, pero en el caso de la flota es un consumo muy grande y va a ser complicado porque es un ítem que se va muy arriba y no se compensa sacando los barcos. Esto ya está pasando en Europa donde las flotas están muy comprometidas porque el golpe de precio fue muy fuerte. Acá todavía lo estamos soportando, pero si sigue así va a ser un problema más que tendremos que sumar».
Acumulación de stock
A la hora de sumar todos estos inconvenientes, Ventura Lafuente no dudó en asegurar que este 2022 «va a ser muy complejo, con variables que podrán ir afectando a otras«. Y, por supuesto, todos estos problemas terminarán impactando en el empleo de la industria pesquera: «Esto va a incidir en la discusión salarial porque forma parte de la estructura de una empresa. En las negociaciones vamos a intentar que todo esto influya lo menos posible, pero no vamos a poder evitar que las empresas afectadas tengamos que reducir la producción o tomar otras medidas. Lo más conveniente es que las negociaciones salariales sean tranquilas, nosotros siempre respetamos que la gente tenga un nivel de salario acorde a los niveles de inflación, en este año vamos a intentarlo pero tenemos que ver cómo nos queda la ecuación». Por último, Ventura Lafuente afirmó que la baja en la producción repercutirá en la mano de obra: «Ahora mismo estamos viendo que se está acumulando producto, el stock está creciendo y si el mercado no responde, por todos los problemas que comentamos, habrá que parar de producir hasta sacar los stocks y eso repercute directamente en la mano de obra».