Calamar
Nacionales
CAPA y el SOMU no sellaron el acuerdo salarial en vísperas del comienzo de temporada en la que tampoco hay muchos datos sobre abundancia del molusco. El recurso tuvo un 2018 en positivo.
La temporada de calamar quedará formalmente habilitada el próximo 7 de enero para la zona comprendida al sur del paralelo 44º S, luego que la autoridad de aplicación y los científicos del INIDEP avalaran el pedido que hicieron desde CAPA, la cámara que agrupa a la flota potera.
Poder salir a pescar unas semanas antes como ocurre desde hace un par de años, en lugar de los primeros días de febrero, como forma de competir en mejores condiciones comerciales con la flota extranjera que opera sobre la milla 201, asoma por ahora como el dato más certero en este comienzo de temporada.
Se estima que unos 65 buques participarán de la zafra de calamar en aguas nacionales aunque todo depende de la negociación salarial que la cámara mantiene con el SOMU. Las partes han sido convocadas por el Ministerio de Trabajo para el próximo miércoles 2 de enero luego que las negociaciones particulares no generaran puntos de concordia.
Según pudo saber este medio las partes estarían próximas en el porcentaje a actualizar de los básicos del convenio, actualización que alcanzaría una suba de más del 40% en dos tramos, pero mantendrían diferencias en cuanto a los valores de producción.
Pero hay una incertidumbre mayor a la negociación paritaria abierta a una semana de comenzar la faena. Los datos que llegan sobre la abundancia del molusco no son buenos. “Los buques arrastreros argentinos que el año pasado habían capturado casi 500 toneladas en dos meses, apenas trajeron unas 30 toneladas de entero”, confió un armador alineado a la cámara.
No hay datos científicos del INIDEP sobre el estado de las poblaciones: el año pasado la flota capturó en las primeras semanas ejemplares del stock desovante de verano y luego del stock subpatagónico.
“Otra vez saldremos a pescar a ciegas. Afuera hay más de 120 barcos con rendimientos muy pobres, una tonelada por día”, confió la fuente consultada.
El calamar fue una de las especies, junto con el langostino, que motorizó desembarques y exportaciones hacia cifras positivas a partir del incremento de capturas y precio en los mercados internacionales.
En los primeros diez meses del año se exportaron 92.078 toneladas que generaron 236,5 millones de dólares, con un valor promedio de venta de 2569 dólares la tonelada. Las cifras representan una mejora del 21% en volumen, un 30,9% en valor y el 8% en el valor promedio.
El tamaño del recurso de la zafra pasada donde se declararon descargas por encima de las 100 mil toneladas estuvo dominado por tallas chicas, entre SS, S y M. Se advierte en la discriminación de las exportaciones. Entre enero y octubre se exportaron 81 mil toneladas de calamar entero y apenas 8322 toneladas de vaina.