La Asociación Argentina de Capitanes Pilotos y Patrones de Pesca, ha resuelto decretar un paro total de actividades de la flota pesquera nacional a partir del próximo lunes 17 de mayo, como consecuencia del trato inhumano que están recibiendo los compañeros embarcados en el Buque Pesquero “MISHIMA MARU N° 8” M.N. 02175, amarrado en el Puerto de la Ciudad de Comodoro Rivadavia, quienes se encuentran atravesando un brote de COVID-19 a bordo e impedidos de desembarcar y sin recibir la atención médica que algunos compañeros requieren atento a los síntomas propios de la enfermedad.
La Administración Portuaria del Puerto Comodoro Rivadavia y las autoridades sanitarias de la Provincia del Chubut y de la Ciudad de Comodoro Rivadavia, han demostrado una total desaprensión por la atención y asistencia médica de los tripulantes a bordo, habiendo negado la posibilidad de que los trabajadores desembarquen para ser alojados, con cargo a costa de la empresa, en un lugar digno que les permita transitar la enfermedad en mejores condiciones.
Por el contrario, el Capitán del buque ha tomado conocimiento en forma indirecta de que se le habían labrado actuaciones por la Prefectura Naval Argentina de Comodoro Rivadavia imputándole haber entrado a puerto sin autorización, cuando en realidad ante el agravamiento de la situación de uno de los tripulantes y frente la falta de respuesta de las autoridades portuarias ante sus desesperados pedidos para ingresar a puerto, realizó un ingreso forzoso amparado en sus facultades como Capitán, ponderando la vida de los tripulantes por sobre la burocracia sin rostro humano. A esta gravísima situación, se suman brotes de COVID-19 en otros buques de la flota pesquera nacional, que han recibido similar trato deshumanizante.
Asimismo, la Asociación Argentina De Capitanes Pilotos Y Patrones De Pesca reitera la petición realizada ya en varias oportunidades a la Ministra De Salud de la Nación, a los efectos de que todos los trabajadores de la pesca, considerados como personal esencial, sean vacunados en forma urgente y prioritaria, teniendo en cuenta que se trata de una actividad en la que las condiciones estructurales de producción hacen casi imposible que sea desarrollada en condiciones sanitarias seguras frente a la pandemia de COVID-19, lo que reiteramos la realidad ha puesto de manifiesto con la gran cantidad de tripulaciones completas que han tenido brotes de contagio a bordo y en alta mar.