Según la estadística oficial de la Subsecretaría de Pesca, hasta el 2 de diciembre pasado se llevaban declarados desembarques de la merluza del efectivo al sur del 41°S, 220 mil toneladas. La mitad corresponde a buques arrastreros congeladores, consolidando un fenómeno que comenzó a mostrarse hace unos años. Los barcos factoría pescan más merluza que los fresqueros que este año no llegan a las 100 mil toneladas.
Lo que la estadística no marca es el precio que se está pagando la merluza fresca en los muelles de Mar del Plata, epicentro de las descargas de hubbsi. De acuerdo a distintas fuentes consultadas los armadores fresqueros están recibiendo 33 pesos más IVA para frigorífico con destino a exportación y 32 pesos para plaza; compradores que la reprocesan para mercado interno, así lo informó REVISTA PUERTO
Valores
Los valores parecen el piso para esta temporada 2020 que tuvo su pico en el invierno cuando el precio rozó los 80 pesos por kilo en un contexto singular: el achique de la oferta a partir de que la flota busca al langostino como especie objetivo.
“Estamos en el valor de costo, es más o menos esos 33 pesos”, reconoció Federico Angelleri. El barco Argentino salió el sábado a la tarde y llegaba al cierre de esta edición, en la noche del miércoles. En dos días de pesca completó 4 mil cajones. “Ya cerramos el año la semana que viene; creo que este será posiblemente el último viaje del barco”, anticipó el empresario de Pesquera Veraz.
“Los barcos están tardando poco y los compradores somos siempre los mismos”, dice Fernando Mellino, de Pesquera 27 de Noviembre, que a pesar de todo cree que esos 33 pesos son el piso y no caerá más abajo.
“Varía mucho el precio en función de qué barco es el pescado. Algunos lo trabajan mejor que otros y siempre hay una diferencia pero anda en esos valores”, dijo el industrial, en tanto aclaró que “más allá de eso, el pescado que está viniendo no es bueno, un poco blando y si no lo trabajás enseguida no sale bien”, amplió el industrial.
Pesca
El temor a que baje tenía fundamento en que todavía faltan varios barcos entrar a puerto. Algunos están sobre la línea del paralelo de 42° Sur, fuera de la zona de veda permanente de juveniles de merluza. En ese grupo ayer al mediodía estaban los barcos Beagle, Fonseca, Margot, Antonino, Piedrabuena, Camerige y Virgen María.
Un poco más al norte aparecían en el radar el San Andrés Apóstol, Madre Margarita, Virgen María Inmaculada, Pedrito y el Marcala, los cuales descargarán en los próximos días más merluza fresca.
“El gasoil, la estiba, el canon del puerto; todos nos ponen el precio, hasta las pescaderías, pero nosotros no podemos poner el precio del pescado que pescamos. Esos 33 pesos es lo mismo que valía en 2017”, se queja Eduardo García, tradicional armador fresquero de Mar del Plata. “Hoy perdés plata saliendo a pescar pero si no la pescás te sancionan”, completó.
Sobre el motivo por el cual el kilo de filet ha crecido casi hasta los 400 pesos en las pescaderías, un empresario local refirió a la existencia de muchos intermediarios en la rueda. “Hay gente que revende el pescado entero. Eso encarece el precio, pero que valga 10 veces más el filet que el pescado entero, son cosas que antes no pasaban”, analizó Eduardo “Carpincho” García.