Empresarios, trabajadores y autoridades ponen en juego su ingenio y voluntad para que el comercio exterior no se detenga a pesar de la pandemia.
Los ejemplos se multiplican en distintos enclaves del país. Con diferentes tipos de medidas, los actores adecúan sus operaciones para no frenar el abastecimiento interno y el ingreso por exportaciones.
Este jueves, arribó al muelle de ultramar de la Terminal de Contenedores II de Mar del Plata el buque porta contendores “Arsos” de la naviera Maersk y movió 360 TEUs (unidad equivalente a un contendor de 20 pies). De esta forma, ingresaron insumos indispensables para abastecimiento y se exportaron contendores con calamar entre otras mercaderías.
Se tomaron medidas preventivas para el personal de estiba y servicios que participó de las maniobras de carga y descarga y se controló la fiebre a toda la tripulación que permaneció a bordo.
“Incorporamos indumentaria y elementos de seguridad adicionales. Como nuestra primera preocupación son los trabajadores, compramos el mejor equipamiento para estos casos, con máscaras doble filtro, protectores de ojos, guantes y trajes aislantes. Trabajamos con aún más cuidados de los que establece el protocolo sanitario. Le avisamos, eso sí, a la naviera que la operatoria por estas circunstancias iba a demorarse algo más de lo habitual porque la haríamos en dos etapas. El jueves procedimos a la descarga, la gente fue a su casa, cambiamos los trajes, y el viernes se produjo la carga de los contenedores”, dijo a Transport & Cargo Emilio Bustamante, responsable de la Terminal de Contenedores II de Mar del Plata.
El directivo señaló que, por tratarse de la época de zafra de calamar, hay muchos buques poteros esperando ingresar al puerto que no son descargados porque parte del personal de estiba se niega a hacerlo.
“Esperemos que esta exitosa experiencia que estamos llevando a cabo los anime a descargar estos buques porque esa mercadería es toda de exportación y genera importantes divisas para el país”, destacó Bustamante.
En Puerto San Martín, desde donde parte gran parte de la exportación agro industrial de la Argentina también se logró un importante avance al instalar un puesto sanitario único.
La iniciativa pertenece a la delegación Puerto San Martín del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, que a nivel nacional preside Julio González Insfrán. Por allí deberán pasar todos los trabajadores portuarios que se dirijan a realizar sus tareas a bordo de los buques de ultramar que, provenientes del exterior, vienen a cargar a los puertos que integran el complejo agroexportador industrial de San Lorenzo, Timbues y Puerto San Martín.
Los controles sanitarios se realizan conforme las normas del Protocolo de Prevención del Covid19 de la Municipalidad de Puerto San Martín, con la participación de médicos del Centro Cooperativo de Rescate y Emergencias Portuarias de la Cooperativa Portuaria de Puerto San Martín. Asimismo, está avalado por Sanidad de Fronteras y conjuga el trabajo coordinado y en equipo entre sectores sindicales, municipal y nacional.
Según informa el sitio compromiso fluvial.com, cada uno de los trabajadores que embarque será identificado con una pulsera de color celeste, cuya duración de control sanitario será de 24 horas; y es obligatorio que cada trabajador pase y sea controlado al momento de embarcar y desembarcar.
Por su parte, el Centro Despachantes de Aduana (CDA), con el fin de preservar la salud de sus asociados y minimizar la circulación, en este nuevo marco social, lanzó este jueves en conjunto con la Aduana de Buenos Aires una nueva herramienta que permitirá coordinar las operaciones aduaneras.
Cada socio, desde el sector de “ingreso socios” en la web del CDA, tiene la opción “coordinación aduanera verificación”, que le permite cargar su destinación de importación-exportación y recibir un turno otorgado por la Aduana de Buenos Aires, el cual le indicará qué día y hora deberá ir a coordinar su destinación. De esta manera, el despachante, sólo se movilizará en el horario del turno indicado, facilitando la circulación mínima indicada por el gobierno nacional.
“Esta es una herramienta informática que ponemos a disposición del estado para ayudar a ordenar los despachos y minimizar la circulación de personas frente a esta emergencia. Es exclusiva para destinaciones de canales rojos y naranjas, además, el horario de carga de destinaciones será hasta las 15 de cada día”, dijo a este medio Enrique Loizzo, presidente del CDA.
Otra gestión de consenso se produce en el complejo portuario de Campana. Los agentes marítimos, en conjunto con la aduana local, implementaron un protocolo para llevar a cabo los trámites en forma digital. Toda la documentación se está tramitando vía e-mail y lo mismo se consiguió con otras autoridades que intervienen en el despacho de los buques por lo que hoy pueden realizar una entrada o salida sin necesidad de ir a bordo, y así conseguir un proceso mucho más seguro y ágil.
Fuente: Transport & Cargo, El Cronista
