Así lo aseguró Myriam Monasterolo, directora del Área Programática Sur, quien se refirió a la investigación epidemiológica que se lleva a cabo a partir del brote de casos de coronavirus que surgió luego de que 8 marineros dieran positivo de coronavirus. Y además habló de las declaraciones vertidas por el concejal que pidió “hisopar a las prostitutas” de la ciudad.
Tras las polémicas declaraciones realizadas por el concejal radical de Comodoro Rivadavia, Omar Lattanzio, quien solicitó a las autoridades practicar hisopados a las prostitutas de la ciudad, en relación a los 8 casos positivos de coronavirus de los marineros, Myriam Monasterolo, directora del Área Programática Sur, habló sobre estos dichos.
Cabe recordar que el edil manifestó que existía la posibilidad de que antes de ver a sus familias, alguno de los marineros haya estado en contacto con una prostituta. “El concejal tendrá su opinión y es respetable, y se hará cargo de las opiniones que vierte. Pero el trabajo epidemiológico se basa en un estudio de foco con cada una de las persona que identificamos como caso positivo”, explicó Monasterolo.
Y señaló que desde allí se comienzan a analizar contactos estrechos, que surgen por la información que la persona brinda al personal médico, en el marco de un secreto confidencial. Y también “por parte de las personas que saben que han tenido contacto estrecho que llaman y nos manifiestan haber tenido vínculo con algún caso positivo”, dijo.
La directora del Área Programática además aseguró que “nosotros hemos hisopado a las familias, novias, amantes y prostitutas; se ha hisopado todo lo que tiene que ver con los contactos estrechos de estas personas”.
Mientras tanto, detalló que “ésa es la manera de seguir trabajando, con un análisis serio, pormenorizado, identificando contactos estrechos y no saliendo al voleo a hisopar a toda la sociedad”, así lo indicó ANDSur.
Por último, afirmó que la información sobre los contactos estrechos de cada caso positivo “entra dentro de la privacidad del paciente. Se arma una historia clínica y epidemiológica; se debe firmar un acta de confidencialidad”, aclaró a La Cien Punto Uno.