Mayores controles desde la Dirección Nacional de Control y Fiscalización Pesquera de la Nación llevaron a mejorar la calidad de la pesca en el mar argentino.
Durante la temporada de langostino, que inició el 15 de abril y finalizó el 20 de julio, la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura de la Nación llevó a cabo un exhaustivo proceso de fiscalización en los puertos de las 5 provincias con litoral marítimo. Se supervisaron 949 descargas de buques pesqueros que transportaban especies objetivo de langostino, de un total de 952 desembarques realizados.
El Dr. Julián Suárez, Director Nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera, encabezó un equipo que brindó apoyo en el puerto de Chubut, respaldando el «Sistema Nacional de Inspectores«. Gracias a sus esfuerzos, casi el 100% de las descargas fueron controladas adecuadamente.
Loable trabajo de Franco Albanesi que además de la tarea general de control y fiscalización en muelles, es un importante vínculo con el sector operativo pesquero, solucionando innumerables inconvenientes con los que se tropiezan las empresas armadoras, como ser clasificación de especies en plantas, solicitudes de extensión de plazo de pesca de langostino según Res.7/2018 y hasta reproceso de especies como el calamar; todas informaciones que se tratan por módulo TAD y SiFIPA.
En el periodo mencionado, se registraron un total de 53.600 toneladas de langostino descargadas, con 565 desembarques realizados por buques fresqueros y 399 por buques congeladores. A raíz de las observaciones efectuadas, se detectaron 48 posibles infracciones por exceso de peso en los cajones, notificaciones enviadas electrónicamente a las empresas armadoras correspondientes.
El Subsecretario de Pesca y Acuicultura de la Nación, el Dr. Carlos Liberman, enfatizó que » durante esta zafra se ha notado una tendencia hacia prácticas de pesca más sustentables por parte de las empresas armadoras, sindicatos y otros actores del sector. Esto ha llevado a obtener un recurso de excelente calidad, lo cual ha sido muy valorado en los alicaídos mercados internacionales «.
En resumen, la temporada de langostino ha sido objeto de una estricta fiscalización, lo que ha permitido mejorar las prácticas pesqueras y fomentar la sustentabilidad en el sector, reflejando positivamente en la calidad del recurso y su recepción en los mercados. No obstante, y desagiando los valores record de capturas y desembarques de los primeros 3 meses representativos de la zafra en aguas de jurisdicción provincial, la temporada en aguas nacionales esta siendo regular y de menor cantidad de capturas comparadas al año pasado, no solo en el segmento norte del paralelo 42 sino dentro de las subareas abiertas a la pesca desde el paralelo 43 hacia el 47.
