Así lo interpretan los trabajadores del STIA que ayer salieron a la calle para exigir una salida al conflicto de ese gremio que mantiene a la flota paralizada y las plantas de procesamiento desabastecidas. Los eventuales llevan casi un mes sin trabajar, y será un mes sin cobrar.
Las consecuencias del paro total del SOMU en el puerto de Rawson ya son cada vez más fuertes, no solo en el plano económico, sino también en el social, por la gran cantidad de trabajadores de las plantas de procesamiento que ven peligrar su fuente laboral.
Ayer, más de doscientos obreros del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación de Rawson y Puerto Madryn se movilizaron por las calles de la capital de Chubut pidiendo que el gobierno provincial intervenga de lleno en el conflicto y se dicte un laudo arbitral para que la flota pesquera pueda salir a pescar, y con ello garantizar el aprovisionamiento de materia prima a las plantas.
Las procesadoras están desabastecidas desde hace casi un mes y se comenzó a prescindir de los empleados eventuales, los que llevan un mes sin trabajar; consecuentemente, día no trabajado es día no cobrado.
La semana pasada fueron los estibadores del SUPA que salieron a pedir una salida al conflicto del SOMU, y desde la conducción del gremio de los marineros les recomendaron a los otros gremios que no se inmiscuyan en sus negociaciones; pero ahora también salió el STIA a la calle por las graves secuelas que trae a la actividad la continuidad del paro de la flota amarilla.
Desde el STIA alertan que se están poniendo en peligro miles de empleos de las plantas y por eso se movilizaron hasta la Casa de Gobierno en Rawson, donde fueron recibidos por el ministro Coordinador de Gabinete, Marcial Paz, a quien le entregaron un petitorio en el que se insta a la rápida intermediación del Estado para solucionar el conflicto que se prolonga por la cerrada postura de la dirigencia del SOMU a aceptar los diferentes ofrecimientos de mejora salarial.
Posteriormente el diputado José María Grazzini, a cargo de la Presidencia de la Legislatura Provincial, recibió en la tarde del martes a representantes del Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA), encabezados por su secretario general Luis Núñez y el dirigente Fabián Molina, quienes entregaron un petitorio y transmitieron la demanda de los trabajadores de las plantas pesqueras de Rawson y Puerto Madryn, para que se les garantice la materia prima y así poder trabajar.
El reclamo se origina en la retracción que registra por estos días el procesamiento de pescado en tierra a raíz de medidas de fuerza que llevan adelante personal de marinería y de la denominada Flota Amarilla en el puerto de la capital provincial.
A través del petitorio solicitaron la intermediación, también, del Poder Legislativo, que permita iniciar un laudo arbitral entre las partes en conflicto, como así la generación de legislación coadyuvante a sostener la actividad de las plantas en tierra durante la baja temporada de la pesca de langostino y que el Poder Ejecutivo disponga una ayuda económica que les permita paliar la actual coyuntura por falta de actividad.
El paro del SOMU no solo pone en peligro miles de empleos, tal como sostienen desde el STIA, sino que también ya repercute fuertemente en el comercio de Rawson. Un mes de paralización total de la industria pesquera tiene sus consecuencias en otras actividades conexas: la estiba, el transporte, y el comercio en general advierten que, hasta el momento, las pérdidas son millonarias.
Revista Puerto
