Todos los gremios involucrados en la pesca se declararon en alerta por la caída de la actividad. Aseguran que las empresas no sacan los buques a pescar, que otros se fueron al sur y que los fresqueros traspasaron sus cupos a congeladores, informó 0223.
Mientras muchos otros sectores se muestran expectantes por el cambio de rumbo económico en la Argentina, la situación del Puerto parece que no se modificó demasiado. Al contrario, los gremios aseguran que por estas horas la actividades es más baja de lo que había pasado en los últimos años. Por eso, siete gremios de la pesca nucleados en la CGT se declararon en alerta y pidieron respuestas urgentes de las autoridades.
“El Supa, Saon, Simape, Somu, Patrones de Pesca, Siconara y Supara, nucleados en la CGT Regional Mar del Plata, nos encontramos en un estado de alerta por la situación que se presenta en relación a la pesca y la caída de la actividad, tanto de los buques fresqueros de altura como buques de banquina amarilla o costera”, señala un comunicado difundido en las últimas horas.
Los gremios señalan que la decisión de las empresas de “no sacar los buques a pescar afecta tanto al personal embarcado como a los gremios de tierra”. “La consiguiente pérdida de puestos de trabajo se suma al conjunto abultando los alarmantes números de desocupación ya vigentes en nuestra ciudad”, agrega.
A su vez, el comunicado remarca que el trabajo en tierra también se ve afectado por el “traspaso del cupo de merluza de los barcos fresqueros a los congeladores”, quienes exportan la materia prima que obtienen sin darle ningún tratamiento en tierra.
“Eso genera que en algunos casos, los buques fresqueros que trasladan una parte de su cuota, vean reducida la cantidad de viajes que pueden realizar en el año. Y en otros casos más graves aun, los buques fresqueros son comprados por empresas armadores de buques congeladores al solo efecto de obtener los cupos. Ambas situaciones también afectan el normal desarrollo de la actividad, contribuye a aumentar el desempleo y la falta de recursos frescos para el personal de trabajo en tierra (Supa; estibadores; Saon, obreros navales y prácticos de muelle y Soip, fileteros y personal de planta de procesamiento en tierra)”, detalla el comunicado.
A su vez, los referentes de los gremios explican que la dificultad se agrava todavía más porque sesenta barcos fresqueros abandonan el puerto de Mar del Plata para ir a la zafra de langostino en el sur durante cinco meses en el año. “Cuando vuelven quedan parados por tiempo indeterminado”, señalan.
Con todo ese combo, dicen, hay “gran cantidad” de personal embarcado y personal de tierra “sin la oferta de trabajo de otros años, la que ya era escasa”. “Nos encontramos con empresarios que aprovechan esta situación y vulneran los derechos establecidos en los convenios colectivos de trabajo vigentes y las actas actuales respecto del personal embarcado y en cuanto al trabajador de tierra”, precisan.
La crisis en el Puerto hizo que se multiplicaran “las plantas de procesamiento ilegales”, donde los trabajadores no están debidamente registrados y cumplen sus tareas lejos de las condiciones requeridas de seguridad e higiene. “La comunidad trabajadora del puerto se encuentra en una situación de vulnerabilidad y crisis que inevitablemente, se traslada a Mar del Plata”, indican.
Los referentes del sector ya les trasladaron esta “compleja situación” a las autoridades provinciales, en distintas reuniones que mantuvieron con representantes del sector. “Con la necesidad prioritaria de generar trabajo en tierra, que sea registrado y en condiciones seguras, como asimismo de defender la actividad fresquera teniendo la cantidad de puestos de trabajo que genera, renovar la flota pesquera con mano de obra nacional y erradicar la actividad económica clandestina, reclamamos políticas específicas y ponemos a disposición nuestras organizaciones para generar las mesas de trabajo necesarias para hallar las soluciones a la diversa problemática de puerto marplatense”, concluyen.