La Revista Puerto reveló datos del último tiempo respecto a la “pesca ilegal”, que en la temporada estival cobra mayor relevancia por la cantidad de buques extranjeros que llegan a estas latitudes para depredar los mares, y planteó las dificultades técnicas para trabajar en medidas al respecto.
La importante cantidad de buques suelen observarse desde el aire, configurando las “ciudades flotantes” que se conocen mediante las imágenes; e impactan no solo en la cantidad y calidad de los recursos para el sector nacional sino que también tienen sus consecuencias en la biodiversidad y la preservación de las especies.
En este contexto, se explicó que en el límite de la Zona Económica Exclusiva Argentina (ZEEA), en la milla 201, se han contabilizado en reiteradas ocasiones más de 300 buques extranjeros y hasta 600 en ocasiones, en su mayoría concentrados a la altura del Golfo San Jorge, Chubut.
Si bien los buques no realizan “pesca ilegal”, en cuanto a que no se encuentran en la ZEE, están en el límite y capturan las mismas especies que el sector pesquero argentino explota bajo normas de ordenamiento fijadas para garantizar la sustentabilidad y trazabilidad.
La situación, ha sido denunciada por sector pesquero como “injusta y desleal” para las empresas argentinas, aunque su encuadre aún no definido dificulta trabajar en soluciones al conflicto.
Al tratarse de aguas internacionales, no se encuentran bajo ningún tipo de legislación lo cual impide catalogar a estos barcos como “ilegales”, salvo aquellos buques que efectivamente ingresan al Mar Argentino, como ha ocurrido.
Sin embargo, el número de barcos atrapados en aguas de jurisdicción argentina es ínfimo respecto de la gran cantidad que ingresa diariamente en nuestra ZEE, los cuales no logran ser capturados ni identificados
Ante la imposibilidad de declarar la actividad como “ilegal” por encontrarse técnicamente fuera de la ZEE, se busca encuadrar el accionar de las flotas extranjeras en una figura que defina la actividad y permita avanzar en eventuales medidas.
Pesca no reglamentada
Es por ello que se habla de “pesca no reglamentada”, en cuanto a que se trata de aquella realizada en zonas o en relación con poblaciones de peces respecto de las cuales no existen medidas aplicables de conservación u ordenamiento.
La “pesca no reglamentada” podría ser el único término que puede definir cabalmente las actividades pesqueras de los buques extranjeros en el Atlántico Sur, en general de bandera china o española.
En el Atlántico Sur no hay reglas, todos pescan indiscriminadamente y generan un gran perjuicio al medio ambiente, impactan nocivamente sobre los recursos pesqueros y resultan en una competencia desleal para la industria pesquera argentina.
Poder encuadrar la actividad de la flota extranjera en el Atlántico Sur como pesca ilegal aumentaría las posibilidades de resolver el problema, pero para ello se requiere de un trabajo interdisciplinario que hasta ahora solo existe en las gacetillas de Cancillería sin correlato en la vida real. “Es necesario pasar de los discursos a la acción”, reclaman desde el sector Pesquero.
