La ciudad de Rawson fue la primera en verse afectada en la baja de tensión por una deuda con la mayorista del mercado eléctrico. En idéntica situación se encuentran Trelew, Comodoro Rivadavia y Puerto Madryn, donde hay plantas procesadoras.
La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) redujo de manera compulsiva la tensión energética a la ciudad de Rawson, como medida punitiva por la deuda de 450 millones de pesos que la prestadora local de servicios públicos mantiene con la proveedora.
La sanción es la primera que se impone a una prestataria de Chubut y se produjo el día viernes, en esta ocasión solo por el lapso de cinco horas, pero se profundizaría si no se cancela la energía adeudada.
La reducción de potencia en el servicio eléctrico afecta a la población en general y en la industria en particular. “Las empresas pesqueras podrán sufrir consecuencias en los arranques de motores, por frecuencia de sus motores que verán modificados sus parámetros normales”, alertaron desde la Cooperativa de Servicios Públicos de Rawson, ni bien se impuso la sanción energética.
La repentina caída de la tensión eléctrica afectaría a los equipos de congelado y refrigeración de las plantas de procesamiento. “Los aparatos sensibles son los que tienen motor, porque sí o sí necesitan trabajar a la potencia para la que fueron construidos. Al bajar la tensión aumenta la corriente; entonces se sobrecalienta el motor, y pueden quemarse. También puede afectar las instalaciones eléctricas”, reconocieron desde la Cooperativa.
El dato no es menor y causa preocupación en el sector porque además de las prestatarias de la capital chubutense, las cooperativas de Trelew, Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia, también fueron calificadas como “morosos crónicos” por parte de Cammesa y ya fueron intimadas, quedando supeditadas esas ciudades a sanciones de similares características.
Justamente, en todas estas ciudades hay plantas de procesamiento de pescado y corren riesgo de quedar expuestas a estos arbitrarios recortes energéticos a pesar de que no presenten deuda como usuarios de los servicios.
La medida fue ordenada a Transpa (Transportadora Patagónica de Energía) por Cammesa, la empresa mayorista a la que las cooperativas de Chubut le deben alrededor de 5.000 millones de pesos.
En el caso de Rawson la deuda ronda los 450 millones de pesos. También Cammesa avisó a las prestatarias de Comodoro Rivadavia, Trelew y Puerto Madryn que deberán reducir la potencia un 10 por ciento porque son “deudores crónicos”. Esta semana que se inicia será clave para el desarrollo de los acontecimientos, ya que el abrupto recorte comenzaría a extenderse a las otras ciudades y el lapso de bajada de tensión sería superior a las cinco horas.
El “castigo” a la prestadora por no pagar la energía que compra y distribuye se tradujo en una reducción inicial de potencia a 198 voltios en vez de 220 voltios, es decir 10 por ciento menos. Esa caída de tensión repercute tanto en la red domiciliaria como en el tendido eléctrico de los parques industriales. Las plantas procesadoras requieren determinado nivel de potencia para mantener sus grandes equipos de congelado y refrigeración.
Qué es lo que ocurre
Las cooperativas, que en Chubut son las prestadoras de los servicios públicos, están colapsadas. La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA) reclama, con intereses actualizados, una deuda que ronda los 5.000 millones de pesos. Las cooperativas compran la energía a la mayorista, se la venden y cobran a los usuarios, pero no la pagan a la proveedora. Eso hizo una bola de nieve que, valga la metáfora, eclosiona en pleno invierno.
Las consecuencias de estos desmanejos ahora terminan afectando a usuarios residenciales e industriales, y esta semana podrían interponerse recursos de amparo en la justicia federal, por tratarse de servicios “esenciales”, pero a lo sumo con ello se postergaría el problema sin que se resuelvan las cuestiones de fondo.
Revista Puerto
